Málaga.- Tribunales.- Condenan a un venezolano por un delito de maltrato y amenazas, pero lo absuelven de violación

Actualizado: sábado, 7 febrero 2009 14:09

MÁLAGA, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Provincial de Málaga ha condenado a dos años de cárcel a un hombre de nacionalidad venezolana por un delito de malos tratos y por otro de amenazas sobre su pareja, pero le absuelve de tres delitos de violación, de cinco de malos tratos y de otro de violencia habitual en el ámbito familiar, de los que le acusaba la Fiscalía, que pedía en total 40 años de cárcel.

Además, se le prohíbe acercarse a la mujer en cuatro años y se aplica la agravante de reincidencia, porque ya fgue condenado por maltrato pero hacia su esposa. El procesado y la víctima iniciaron la relación en noviembre de 2006 y en enero de 2007 se fueron a vivir juntos en el municipio malagueño de Benalmádena. Según la sentencia, se declara probado que un día de julio de 2007, éste empezó a echarle en cara una supuesta infidelidad.

En un momento, sigue la resolución a la que tuvo acceso Europa Press, "le propinó a la mujer dos fuertes bofetadas en el rostro, la agarró por el cuello, apretando con fuerza y continuó golpeándola en la espalda", sin que la víctima fuera al médico. En septiembre del mismo año, se presentó en su trabajo y como ésta se negó a marcharse, empezó a decirle que "iba a pegarle y que iba a buscarle la ruina".

Para la Sala, estos dos hechos están probados al existir pruebas periféricas, aunque no queda acreditado que el acusado, durante el periodo que convivió con la mujer, la insultara o agrediera de manera indiscriminada y reiterada, ni que menoscabara su integridad física o psicológica. Tampoco se entiende probado que la obligara a mantener relaciones sexuales, ni otras supuestas agresiones de las que se le acusaba.

En este sentido, el Tribunal señala que aunque en su declaración, la mujer se refirió a episodios concretos "no precisó con exactitud fechas" en algunos casos. Añade que la relación era "tormentosa y con continuos vaivenes" y que los informes hablan de "una convivencia caracterizada por discusiones, pero nada sobre la presencia de indicadores compatibles con maltrato", por lo que apunta que la existencia de una situación de dominación permanente sobre la mujer "no resulta probado".

Respecto a las presuntas violaciones, dice que hay una "sobriedad y absoluta falta de matices en la versión inculpatoria de la mujer en el juicio". Así, se considera que la versión de la víctima "puede hallarse condicionada por el hecho acreditado de que el hombre seguía viendo y manteniendo relación con su ex mujer, lo que había dado lugar a enfrentamientos con aquella". Además, apunta que en su denuncia nada dijo de estas agresiones.

En el juicio, el procesado, de 29 años de edad y trabajador en la construcción de túneles cuando los hechos, negó todas las acusaciones y aseguró que las "pocas" discusiones que mantuvieron durante el tiempo que estuvieron juntos eran "por los celos que ésta tenía de mi esposa". Así, declaró que cuando conoció a la joven le dijo que tenía mujer y explicó que la víctima "rompía la relación cada dos días cuando se ponía celosa de mi esposa".

"Quería que me divorciara, pero yo lo que tenía en mente era volver con mi esposa", aseguró el acusado, quien aseveró que volvió con su mujer en verano de 2007, aunque, posteriormente, siguió viendo a la víctima. Negó insistentemente que realizara actos violentos contra su novia, que le amenazara, que le impidiera trabajar y que la obligara a mantener relaciones sexuales, asegurando que "todas las veces que me he acostado con ella han sido consentidas".