JAÉN, 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Museo Íbero de Jaén ha inaugurado este martes un espacio en recuerdo a los represaliados de la dictadura franquista en la antigua cárcel --sobre cuyo solar se levanta ahora esta infraestructura cultural--, que está protagonizado por una escultura de Miguel Fuentes del Olmo.
Ubicada en el interior del museo, en un pequeño jardín a la derecha de la entrada, se trata de una escultura expresionista fundida en bronce colocada sobre un pedestal de acero que representa una figura humana que cae al suelo. Aparece casi suspendida, con los brazos en alto intentando protegerse de los golpes, pero con los ojos abiertos, manteniendo su dignidad, según ha comentado su autor.
En el acto de su descubrimiento, además, han participado el consejero de Fomento y vivienda en funciones, Felipe López; el presidente de la Diputación, Francisco Reyes, y el presidente de la Asociación de la Memoria Histórica de Jaén, Miguel Ángel Valdivia.
López ha hablado de un homenaje "de enorme valor cargado de simbolismo" en torno a "muchas personas que a través de lucha por la libertad, del sufrimiento en la etapa de la dictadura, acabaron dejando su memoria y huella en este suelo"
En este sentido, ha apuntado que la cárcel provincial "tuvo durante la dictadura el triste honor de ser lugar de ignominia, de represión, de muerte y de dolor para miles de personas". Por ello, la Junta, al proyectar el Museo Íbero no podía dejar que, convirtiéndolo "en un espacio de luz y libertad, no quedara de forma permanente un recuerdo para esa gente que acabó dando lo mejor de su vida en la lucha por la libertad".
Ha aludido, además, al 40 aniversario de la Constitución, un proyecto de vida colectivo para el conjunto de los españoles hecho sobre la generosidad e inteligencia de muchas personas". "Y es momento de, junto a esos 40 años de convivencia democrática que abrieron un horizonte de esperanza, prosperidad, paz y progreso, hacer un acto de justicia", ha asegurado.
Y se hace, en este caso, con "una pieza excepcional desde el punto de vista artístico" y también "por plasmar el dramatismo" de los momentos vividos en la antigua prisión "en esa época tan tenebrosa de la historia de España, que debe servir como vacuna" para no repetirla.
El presidente de la Diputación ha destacado que, si bien para construir el Museo Íbero desde el punto de vista técnico se optó por o dejar ningún resto de la cárcel, había un compromiso del Gobierno andaluz para que no sólo fuera una "referencia del Viaje al tiempo de los íberos", sino que "tuviera un espacio de reconocimiento a la memoria histórica".
"Este espacio que fue lugar de un sufrimiento injusto para personas que por defender la libertad, un gobierno legalmente constituido, su vida acabó o aquí o fueron muchos meses de sufrimiento para ellos y familias", ha afirmado.
SUFRIMIENTO Y ESPERANZA
Por ello, ha valorado su conversión en un lugar "para la cultura, la libertad y las oportunidades de Jaén", aunque sin olvidar lo que fue en el pasado de la mano de una obra del iliturgitano Fuentes del Olmo, catedrático emérito y Medalla de Oro de Andalucía, que recoge ese "sufrimiento, pero también la esperanza que había detrás".
El escultor ha explicado que esta obra se suma a los 14 monumentos de su autoría que se han colocado ya en diferentes municipios de la provincia para la recuperación de la memoria histórica, en ese caso en recuerdo de quienes habían sido fusilados. En esta ocasión, ha pretendido serlo para quienes "padecieron tortura en este lugar, más de 500 personas que sufrieron la muerte después de la tortura".
"Esta bella imagen simboliza la tortura como maltrato físico y psicológico que sufrieron estos hombres y mujeres, miles que estuvieron aquí todos esos años de dictadura", ha incidido, por su parte, Miguel Ángel Valdivia.
