Gracias a su puesta en marcha se ha facilitado la recuperación de aves carroñeras y otras rapaces en Andalucía
SEVILLA, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
La labor desarrollada por la Consejería de Medio Ambiente en el marco de la Estrategia para la Erradicación del Uso Ilegal de Cebos Envenenados ha reducido en un 30 por ciento el empleo de estas sustancias ilegales desde 2004, lo que ha permitido la recuperación de las poblaciones de aves rapaces amenazadas como el águila imperial ibérica, el quebrantahuesos o el buitre negro en Andalucía.
En la lucha contra el veneno la herramienta más eficaz ha sido el trabajo de detección y disuasión de las unidades caninas especializadas, que han llevado a cabo 1.300 inspecciones en cotos de caza y explotaciones ganaderas en los últimos cinco años, 409 sólo en 2009, de las que 286 han sido sólo preventivas, según informó a Europa Press la Consejería de Medio Ambiente.
No obstante, los equipos de perros constituyen tan sólo una de las 61 medidas de acción que componen la Estrategia andaluza de lucha contra el veneno.
Otra medida prioritaria consiste en la organización de sesiones de trabajo con cazadores y ganaderos para concienciar e involucrar a estos colectivos en la lucha contra esta práctica tipificada como un delito en el Código Penal. El pasado año, se realizaron 548 de estas sesiones de trabajo, que ascienden a 1.700 desde 2004.
Asimismo, también ha sido importante el endurecimiento de la normativa mediante sentencias penales, adopción de medidas cautelares en forma de suspensión de aprovechamientos y la apertura de expedientes sancionadores.
SIETE SENTENCIAS CONDENATORIAS
Así, en 2009 se han impuesto sanciones económicas de 200.000 y 60.000 euros a dos cotos andaluces acompañadas además de la suspensión de los aprovechamientos por un periodo de cinco años; mientras que desde 2004, año de puesta en marcha de la Estrategia, ya se han producido un total de siete sentencias condenatorias por este delito.
La lucha contra el veneno es una labor compleja que exige coordinación entre la Administración, la Policía y la justicia. Por ello, en la actualidad Medio Ambiente está trabajando en la creación y formación de Patrullas de Agentes de Medio Ambiente, que estarán formadas por personal especializado en cada provincia y trabajarán en colaboración con los agentes del Seprona de la Guardia Civil.
La eficacia de este programa en la disminución del empleo de venenos ha colocado a Andalucía como referente en la lucha contra estas sustancias, lo que ha motivado que otras comunidades dentro y fuera de España pidan asesoramiento y apoyo a la Junta de Andalucía, de modo que la comunidad andaluza cederá unidades caninas especializadas a zonas como Aragón e Italia.
