Andalucía Acoge pide al Gobierno una política nueva para inmigración que "no se confunda" con el control de fronteras

Actualizado: viernes, 4 abril 2008 15:56

GRANADA, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Federación de Asociaciones Pro Inmigrantes Andalucía Acoge pidió hoy al Gobierno nuevas políticas que gestionen la inmigración desde la ciudadanía y "no se confundan" únicamente con el control de fronteras puesto que en 20 años "no han dado resultado".

En rueda de prensa en Granada, donde desde hoy se celebra la XVII Asamblea de Andalucía Acoge, que se prolongará hasta el domingo, la presidenta regional de la asociación, Ana Jiménez, abogó por activar políticas sociales y económicas en los países de origen y no tantas repatriaciones que, en ocasiones, "empujan" a nuevas personas a una "aventura que acaba en muerte en el Estrecho".

Aunque no precisaron los datos, Andalucía Acoge constató el descenso de muerte en el Estrecho de Gibraltar en los últimos años a consecuencia de las políticas de control de fronteras que dificultan la llegada por esta vía, la proliferación de 'cayucos' a Canarias y la activación del Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE).

Para las diez asociaciones presentes en la asamblea, el Gobierno español tiene la oportunidad de abordar la inmigración desde el reconocimiento a los derechos y deberes que tienen los extranjeros como ciudadanos y como constructores de la España del futuro. En la actualidad, viven en España 2,3 millones de inmigrantes, 252.743 en Andalucía y 26.748 en Granada, según los datos facilitados.

La asamblea tendrá como pilares fundamentales el pasado y el futuro de la inmigración. Los más de 70 expertos que participarán en ella entienden, según manifestó Jiménez, que el Estado debe "focalizar" sus esfuerzos en esta legislatura en la activación de políticas en los países de origen y evitar que los "fondos públicos" se empleen como "chantaje" para obtener repatriaciones.

Además, se centrarán en la modificación de un modelo económico mundial injusto que mantiene las desigualdades Norte-Sur y condena a la miseria a miles de millones de personas. La Asamblea se adentrará en el futuro de la Unión Europea en materia migratoria, que marcará la agenda del Gobierno español, y en la situación de los hijos de inmigrantes, que requieren una apuesta decidida por políticas de intregración que permitan la incorporación de estas personas a una sociedad en la que se sienten partícipes.

La organización quiso también denunciar la "degradación" a la que se ven sometidas las personas recluidas en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Capuchinos en Málaga, por lo que reclama "medidas urgentes" ante esta llamada de atención.