CÓRDOBA, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Junta de gobierno local del Ayuntamiento de Córdoba ha aprobado hoy las bases de la convocatoria que permitirá a cualquier persona, hombre o mujer de entre 18 y 65 años, nacida o residente en la capital cordobesa de manera oficial, participar en el sorteo para la elección de quien encarnará al Rey Melchor en la Cabalgata de Reyes Magos de 2009.
Según explicó hoy en rueda de prensa el portavoz de IU en el gobierno municipal, Francisco Tejada, con dicha convocatoria, "se da respuesta al interés ciudadano que se viene mostrando, año tras año", por la posibilidad de ser uno de los principales protagonistas de la cabalgata municipal, como lo demuestra el hecho de que el pasado año fueron casi 300 personas, en concreto 169 hombres y 122 mujeres, las que presentaron en tiempo y forma su solicitud y pudieron entrar en el sorteo para ser el Rey Melchor el pasado enero.
En concreto, Guillermo Yepes fue el cordobés elegido y que representó al Rey Melchor en la Cabalgata de los Reyes Magos del pasado 5 de enero, en compañía del diestro Manuel Díaz 'El cordobés', como Rey Gaspar, y de Jesús Espejo, como Rey Baltasar, en representación de la Federación de Peñas de Córdoba.
Quienes quieran tener el próximo año ese mismo honor, según las bases de la convocatoria aprobada hoy, dispondrán de un plazo de inscripción para ello que se abrirá el próximo 1 de septiembre y que se cerrará el 1 de noviembre de este año, pero, aunque presenten la solicitud en tiempo y forma y cumplan con todos los requisitos requeridos, no podrán ser elegidos si no están presentes en el momento del sorteo, fijado para el 11 de diciembre próximo.
Al margen de ello y de las condiciones de edad, nacimiento o residencia ya indicados y no haber sido designado en ediciones anteriores, los candidatos a ser Rey Melchor en la Cabalgata de Reyes Magos del 5 de enero de 2009 en Córdoba deberán acompañar su solicitud de un certificado médico que acredite que se reúnen las condiciones físicas para desempeñar la labor requerida, es decir, lanzar caramelos y juguetes durante varias horas, repartiendo alegría e ilusión a grandes y pequeños, sin desfallecer.
