GRANADA, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de CC.OO. en Andalucía, Francisco Carbonero, consideró hoy "lamentable" que la investigación realizada sobre el accidente del viaducto de la A-7 en Almuñécar (Granada), en noviembre de 2005, concluya que fue una especie de "maldición divina" la que hizo "matarse a los seis trabajadores".
En rueda de prensa en Granada, Carbonero lamentó que después de tanto tiempo "no se haya generado cierta sensibilidad" entre quienes han estado investigando el siniestro para "empeñarse en que todos los accidentes son evitables, y éste lo era", recalcó.
Así, manifestó que "desgraciadamente el poder de las grandes constructoras y el peso que tienen en la economía de este país hagan que tengan más valor que la vida de los trabajadores", una reflexión que, a su juicio, debe ser abordada por la sociedad del país que "pretende ser avanzado".
Carbonero subrayó "no podemos permanecer impasibles" cuando suceden tantas muertes y acusó tanto a las empresas como a la Administración de haber sido "poco responsables" en este accidente a la hora de depurar responsabilidades.
Según manifestó el secretario de CC.OO. en Granada, Rafael Roldán, el siniestro se produjo por una "negligencia", ya que se puso en marcha el grupo electrógeno sin verificar la situación", como recomiendan la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
Por eso, explicó, "la cimbra avanzó siete centímetros más por un lado que por otro lo que originó el desplome". Roldán aseguró tener "muy claro" que ese es el motivo del suceso por el que se deben depurar responsabilidades para que "no vuelvan a ocurrir accidentes similares", concluyó.
