GRANADA, 19 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los tres detenidos hasta ahora por la muerte de Beatriz Collado ingresaron hoy en prisión incomunicada, a la espera de que la titular del Juzgado de Instrucción número tres, encargada del caso, les tome mañana declaración, según informaron a Europa Press fuentes de la investigación.
En este sentido, las fuentes precisaron que no se ha decretado prisión incondicional, a la espera de que la jueza les interrogue y decida la sentencia que les será aplicada.
El último de los detenidos por la Policía Nacional en relación con la muerte de la joven Beatriz Collado es un varón de 20 años, que fue detenido el viernes como presunto vendedor del teléfono de la víctima, después de que la pareja arrestada por poseer dicho aparato lo identificara como el hombre al que compraron el celular.
El detenido es vecino de la zona del Polígono y carece de antecedentes penales y policiales. El joven fue detenido sobre las 14.00 horas cuando se encontraba en un coche, acompañado por amigos, en la Ciudad Deportiva Granada 92.
El arrestado niega haber vendido el teléfono y cualquier relación con la muerte de la joven de 27 años, cuyo cadáver fue encontrado el pasado 2 de marzo en el pantano de Cubillas en Granada. El detenido estaría dispuesto a someterse a cualquier prueba para demostrarlo.
Los tres detenidos pasaron ayer a disposición judicial, aunque el Juzgado de Guardia decidió que todos permanecieran detenidos con el objetivo de que la titular del Juzgado de Instrucción número tres les tomara declaración mañana.
El cuerpo sin vida de la joven fue hallado el pasado 2 de marzo, un día después de que se denunciara su desaparición en la zona norte de la capital granadina. Esta fue vista por última vez el pasado día 1 tras llevar en coche a su casa a una compañera de trabajo con la que había estado haciendo deporte por la zona de Alcampo. No obstante, Beatriz conversó telefónicamente con su novio minutos después desde su coche, momento en el que pudo ser raptada.
El vehículo de la joven fue hallado, con la luna rota, en las inmediaciones del Instituto de Educación Secundaria La Madraza, en el granadino Parque Almunia, desde donde habló con su novio la noche de su desaparición.
