GRANADA, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Granada ha condenado a 25 años de cárcel al anciano acusado de asesinar en junio de 2004 a su mujer en Huéscar (Granada), golpeándola con una barra de hierro y acuchillándola hasta morir, pues el tribunal ha declarado al sujeto culpable de un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento con la agravante de parentesco.
Fuentes judiciales informaron a Europa Press de que S.M.R., que ya fue declarado culpable por un jurado popular el pasado jueves, ha sido condenado a 25 años de prisión como autor de un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento con la agravante de parentesco, extremo que ha llevado al tribunal a prohibir además al sujeto a acercarse, contactar con los hijos de la víctima o personarse en el municipio de Huéscar durante cinco años a partir del cumplimiento de la condena.
Igualmente, el tribunal ha condenado a S.M.R. a abonar a cada uno de los hijos de la víctima la cuantía de 200.000 euros en concepto de indemnización.
Durante la última sesión de la vista oral, el fiscal mantuvo la petición de 22 años de cárcel para S.M.R., que había sido acusado de asesinar en junio de 2004 a su mujer en Huéscar, golpeándola con una barra de hierro y acuchillándola hasta morir en represalia por una denuncia que ésta había presentado contra él.
Durante el juicio, los psicólogos declararon que el ya condenado es una "persona absolutamente dentro de la normalidad, sin ninguna alteración en la personalidad", pese a su avanzada edad. Por su parte, los forenses explicaron ante el juez que la mujer presentaba numerosas lesiones tanto provocadas por una barra de hierro como causadas por arma blanca, tras examinar el cadáver, aunque no pudieron precisar la intencionalidad de éstas.
En su declaración el ahora condenado incurrió en numerosas "contradicciones", si bien reconoció haber agredido a su mujer con la barra de hierro, aunque negó que se acercara al cuchillo salvo para cambiarlo de ubicación, del suelo al fregadero, ya que él sostuvo que la que portaba el arma blanca era su mujer y que él la golpeó para "defenderse".
La acusación particular, por su parte, consideró también los hechos constitutivos de un delito de asesinato con las agravantes de alevosía y ensañamiento, a lo que añadió el parentesco, por lo que pidió la pena de 25 años de prisión, pena finalmente impuesta por la Audiencia Provincial.
