JAÉN, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Plan Estratégico 2008-2010 de la Caja de Jaén parte de la "prudencia, el rigor en el control de riesgos y la flexibilidad" para contrarrestar el momento de crisis financiera y lograr un crecimiento sobre seguro y "no a cualquier precio" con el que la entidad espera alcanzar unos beneficios de siete millones de euros.
En rueda de prensa, el presidente de la entidad, José Antonio Arcos Moya, acompañado de la vicepresidenta y el director general, Carmen Espín y Dionisio Martín, respectivamente, destacó que se trata del tercer plan que se presenta bajo su presidencia y destacó que el panorama de "incertidumbre" explica la elección de un escenario moderado de entre los posibles para determinar acciones y objetivos. "En los anteriores había un desarrollo casi natural y un escenario muy distinto al actual", apostilló.
Por esta razón, los principios que inspiran el Plan Estratégico son la prudencia, el rigor y la flexibilidad. "Dado el momento cambiante en los indicadores económicos, el plan también debe ser flexible y dinámico porque habrá que sumar otros datos a los previstos", señaló el director general, quien añadió que esta misma cuestión hace difícil hablar de un espacio temporal mayor a un trienio.
En este sentido, realizó un análisis del entorno en el que remarcó dos grandes asuntos que serán especialmente cuidados por la Caja de Jaén: las tensiones de liquidez "que no han bajado, a pesar de lo cual, las previsiones dicen que habrá mejora tras el verano", así como el riesgo de crédito, puesto que el empeoramiento de la situación económica "deriva en un aumento de la morosidad, que ya se está notando en el sector bancario".
De hecho, en la entidad jiennense el índice de morosidad ha experimentado una ligera subida de una décima desde diciembre de 2007. "Estamos por debajo del sector del entorno de ahorro, que tiene la ratio de morosidad en el 1,2, mientras que la nuestra en estos momentos es de 0,9, lo que significa que la estamos conteniendo de forma positiva e importante", subrayó.
De la misma manera, comentó que los mercados en los que centrará su acción cambian y el inmobiliario cae frente al agroalimentario, la energía renovable, innovación y servicios, a pesar de lo cual, la entidad jiennense dijo que seguirá apoyando la vivienda. Además, sumó el ámbito agrícola, las pymes y la tercera edad como otros sectores importantes para la caja.
Así las cosas, Martín afirmó que los ejes que definen la cultura de empresa de la entidad son el crecimiento, "pero no a cualquier precio"; el control de riesgos, la rentabilidad y el equilibrio financiero que pasa por no bajar la ratio de solvencia del 9,5 por ciento ni la de liquidez estructural, que hoy es del 85 por ciento, del 80.
Según añadió, estas líneas de actuación se concretarán en 2010 en la obtención de unos beneficios después de impuestos de siete millones de euros. Del mismo, modo, el Plan Estratégico prevé un aumento del balance de la entidad del 29,2 por ciento, llegando a los 1.162 millones de euros; mientras que la inversión crediticia subirá en más de un 46 por ciento y los depósitos de clientes del sector privado, en casi un 60 por ciento.
