Piden 15 años de cárcel para un acusado de violar, robar y dejar encerrada a una prostituta

Actualizado: sábado, 29 marzo 2014 13:32

GRANADA, 29 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Fiscalía de Granada ha solicitado una pena de 15 años y medio de prisión para un hombre acusado de violar, robar y dejar encerrada en su propia casa a una prostituta que ya había contratado con anterioridad, hechos por los que será juzgado los días 4, 8 y 9 de abril en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Granada.

Al procesado, Rubén R.L.M., sin antecedentes, se le atribuyen provisionalmente los delitos de agresión sexual en su modalidad de violación, robo con intimidación y un delito contra la libertad o de detención ilegal, por unos hechos que se remontan a mayo de 2013.

Según consta en el escrito de acusación provisional del Ministerio Público, al que ha tenido acceso Europa Press, el inculpado, que había contratado sin ninguna incidencia los servicios de la prostituta el día anterior en el domicilio habitual de la mujer, en Granada capital, volvió al día siguiente, el 22 de mayo del pasado año, sobre las 10,35 horas en actitud "en extremo violenta y con ademanes y gestos agresivos" y le exigió la prestación de nuevos servicios pero esta vez sin pagar nada a cambio.

Ante las primeras negativas de la mujer, de 27 años, el inculpado comenzó entonces a vociferar "soy un hombre peligroso, tengo una banda con la que vendo droga, en mi casa tengo una pistola y te voy a quitar la vida", y después inmovilizó a la víctima llevándola "atemorizada" hasta el domicilio de la vivienda.

Allí, "movido por las lúbricas pretensiones que anunció", la violó mientras le apretaba fuertemente de las muñecas y le tiraba también de su cabellera, impidiéndole de esa manera que demandase auxilio, mientras le gritaba, según el fiscal, "tómate unas rayas, cerda de mierda".

Después, la obligó a practicarle sexo oral y, a continuación, con la intención de "lucrarse" le exigió 2.500 euros, pero sólo pudo apoderarse de los únicos 200 euros que la mujer tenía, además de un ordenador portátil, un teléfono móvil, una televisión y una cámara fotográfica.

Antes de abandonar la vivienda con todos esos artículos, llevado "de la única pretensión de privar de toda libertad de movimientos o deambulatoria a su víctima e impedir que le fuese prestado cualquier socorro, cerró tras de sí y con llave la puerta del dormitorio en cuyo interior quedó aislada la joven por espacio de más de dos horas.