El político colombiano Sigifredo López cree que "la paz en Colombia está más cerca que nunca"

Actualizado: lunes, 20 abril 2009 23:01

GRANADA, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -

El político colombiano Sigifredo López, que fue secuestrado hace casi siete años por las Fuerzas Revolucionarias de Colombia (FARC) y se convirtió en el único superviviente de la llamada 'Masacre de los diputados', auguró hoy en Granada que "la paz en Colombia está más cerca que nunca" y apostó por el "diálogo útil" como única herramienta para alcanzarla.

Precisamente hoy, cuando se cumplen 74 días de su liberación, Sigifredo López ha decidido desplazarse hasta el Instituto de la Paz y los Conflictos de la Universidad de Granada para explicar a través de una conferencia cómo fueron esos "seis años, nueves meses y 26 días de cautiverio", un tiempo "tremendamente difícil", especialmente cuando supo del asesinato de los once diputados que fueron secuestrados junto a él.

"Oí los disparos, pero en ese momento --del 18 de junio de 2007-- no sabía que los estaban matando a cincuenta metros de donde yo me encontraba, supuse que era un rescate. Me enteré diez días después por la radio, como se dieron cuenta todos los colombianos", relató este político natural de Pradera de Valle, que se encontró hoy por primera vez con Álvaro Leyva, la persona a quien las FARC cedió las coordenadas de los cadáveres de sus compañeros para ir a rescatarlos y llevarlos de vuelta a casa.

Aseguró no contar con una explicación racional sobre por qué no fue asesinado: "Los milagros se burlan de la realidad y la lógica", indicó, aunque mostró su intención de "colocar su granito de arena para encontrar una solución política al conflicto", de modo que las nuevas generaciones "puedan conocer una paz en común".

En este sentido, se mostró partidario de que el gobierno negocie con las FARC, "soy un fanático del diálogo útil", señaló, y añadió que la paz está cerca, "no por voluntarismos", sino por cuestiones objetivas que indican que ambas partes "necesitan de la solución".

Por una parte, apuntó, "la sociedad colombiana necesita la solución y por fin la guerrilla ha comenzado también a necesitarla, pues se ha dado cuenta de que políticamente se ha autoderrotado. Los secuestros, las masacres, han hecho mucho daño a Colombia".

Explicó en este sentido que por primera vez en muchas décadas el aparato militar "está a favor de la sociedad colombiana y eso hace que las FARC necesiten una solución".

Apostó por el aprovechamiento de esta situación para hacer una propuesta de paz en Colombia. Consideró que se podría avanzar en este sentido si se abriese espacio al diálogo y la negociación, de modo que "se les permitiera alcanzar algunos de los objetivos que persiguen con las armas", pero un espacio "que no implique impunidad" --matizó-- pues "han cometido delitos contra la humanidad y de ellos deberán responder".

Consideró además que esta propuesta de paz deberá ir acompañada del compromiso gubernamental de introducir reformas "indispensables que siempre se han puesto encima de la mesa" cuando se ha hablado de paz en Colombia, como reformas tributarias y sociales, todo ello al considerar que el conflicto está basado en la injusticia social, la exclusión y la pobreza.