SEVILLA, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -
El PP-A defenderá el miércoles en el Pleno del Parlamento una proposición no de ley en la que se exige a la Junta que lleve a cabo, en el plazo de un mes, un estudio y revisión del transporte público sanitario en Andalucía y del Plan Andaluz de Urgencias y Emergencias (PAUE), aumentando el número de ambulancias en la comunidad, especialmente las asistenciales.
En la iniciativa, consultada por Europa Press, también se demanda a la Junta que ponga en marcha medidas para mejorar la coordinación de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias, que impida que ambulancias no asistenciales acudan a servicios que necesiten una atención sanitaria inicial o un soporte vital básico. Se pide que las ambulancias de la red de transporte urgente que acudan a la asistencia será bajo una valoración in situ de los equipos asistenciales, que serán los que las activen.
Se pide a la Junta que cumpla íntegramente con el real decreto por el que se establecen las características técnicas en el equipamiento sanitario y dotación de personal de los vehículos de transporte sanitario por carretera en las nuevas licitaciones y exigir a las empresas adjudicatarias que a los trabajadores solo se les puedan aplicar los convenios colectivos autonómicos o estatales y no convenios de empresa, que "degradan seriamente los derechos laborales de los trabajadores en beneficio de empresas, que pujan a la baja para hacerse con la adjudicación de la subasta".
Otras demandas consisten en crear una bolsa de trabajo en el Servicio Andaluz de Salud para el personal técnico en emergencias sanitarias y proceder a la paulatina convocatoria de procesos selectivos e incorporación de técnicos titulados en las plazas que corresponden a sus competencias profesionales.
Se demanda también la creación del Colegio Profesional de Técnicos en Emergencias Sanitarias, con el fin de regular y salvaguardar esta profesión, atendiendo al gran número de profesionales titulados y a la calidad asistencial que se ha de prestar a los usuarios de nuestros servicios de emergencias andaluces.
En la exposición de motivos de la iniciativa, el PP-A expone que uno de los tantos problemas sanitarios que afectan a Andalucía es "el mal funcionamiento del servicio público de transporte sanitario" y de hecho los sindicatos del sector han denunciado en varias ocasiones la "nefasta gestión de este servicio" por parte de la Junta, ocasionando "graves problemas para los pacientes y los técnicos en emergencias de las ambulancias que se encuentran con situaciones que no pueden controlar, bien porque envían a un solo conductor y se ven desbordados, o bien porque no llevan personal sanitario adecuado a ciertos avisos".
El PP-A recuerda que hay varios tipos de ambulancias según su finalidad asistencial. A este respecto, explica que sindicatos y asociaciones advierten de que además de la falta de ambulancias, sobre todo de las asistenciales para soporte vital avanzado, se están produciendo situaciones en las que se envía por parte del Centro Coordinador de Urgencias Sanitarias las ambulancias no asistenciales a servicios que requieren asistencia técnico-sanitaria en ruta, con las graves consecuencias que ello conlleva, ya que no están acondicionadas para ello.
Por tanto, según el PP-A, "se está haciendo un uso incorrecto del transporte sanitario en Andalucía con la utilización de ambulancias no asistenciales para asistir a personas que necesitan una atención sanitaria inicial, e incluso con mucha frecuencia la necesidad de un soporte vital básico, poniendo en peligro a los trabajadores de ambulancias y, lo que es más grave aún, poniendo en peligro a los usuarios de este servicio"
"De hecho, en varias provincias andaluzas se ha denunciado situaciones críticas en los traslados de pacientes en ambulancia sin el personal sanitario establecido por la legislación vigente, incumpliendo por tanto el real decreto por el que se establecen las características técnicas en el equipamiento sanitario y dotación de personal de los vehículos de transporte sanitario por carretera", según el grupo popular, que apunta que en algunos casos se ha visto a conductores de las ambulancias obligados a realizar maniobras de atención inicial sanitaria e incluso a realizar maniobras para intentar salvar la vida de los pacientes, cuando se deben realizar por profesionales sanitarios.
