SEVILLA, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de Vox en el Parlamento andaluz, Alejandro Hernández, ha criticado este viernes las nuevas restricciones decretadas por la Junta para hacer frente al avance de la tercera ola de la pandemia y ha lamentado que "la triste realidad es que no hay propuestas y no hay plan más allá de encerrarnos en nuestras casas o de prohibirnos trabajar directamente".
Hernández se ha pronunciado de este modo en declaraciones difundidas por Vox minutos después de que el presidente de la Junta, Juanma Moreno, haya decidido ha decidido el cierre perimetral de cada una de las ocho provincias, de manera que no podrá haber movilidad entre ellas salvo causas justificadas, así como reducir de seis a cuatro el número de personas que podrán reunirse y establece que todos los establecimientos de hostelería y los negocios comerciales tendrán que cerrar a las 18,00 horas.
Moreno también ha anunciado que se ha dirigido al Gobierno de la Nación para solicitarle poder adelantar el toque de queda a las 20,00 horas y confinar 91 municipios con mayor incidencia, más de mil contagios por cada 100.000 habitantes, para hacer frente a la tercera ola del coranavirus en la comunidad.
"Nos preocupa enormemente ver como el presidente Moreno Bonilla y su consejero Aguirre, incapaces de afrontar la grave situación que vivimos, han querido dejar la gestión de la crisis en manos de Sánchez y de Iglesias, el peor gobierno para España en el peor momento posible, delegando de de este modo su propia responsabilidad", ha criticado Hernández.
El portavoz parlamentario de Vox Andalucía considera que "su falta de coraje a la hora de tomar decisiones está llevando a la ruina a nuestra región y a día de hoy la triste realidad es que no hay propuestas, no hay plan más allá de encerrarnos en nuestras casas o prohibirnos trabajar directamente".
Ante esta situación, Hernández ha exigido a la Junta un "refuerzo en la atención sanitaria, garantizando el diagnóstico precoz, el rastreo de los contagios y la correcta atención de todos los enfermos", así como "acelerar el ritmo de las vacunaciones" porque considera "inadmisible que hasta esta semana no se haya pensado en algo tan elemental como vacunar los fines de semana".
