Avisa de que "las soluciones no van a caer del cielo" y del mismo sólo llegarán "partículas contaminantes" si no median soluciones
SEVILLA, 16 May. (EUROPA PRESS) -
Actúa, la nueva formación de izquierdas promovida por el ex coordinador de IU Gaspar Llamazares y el exjuez Baltasar Garzón, ha celebrado este jueves un "paseo electoral" en el metro de Sevilla, con su cabeza de lista a los comicios europeos, María Garzón; el número dos, Tasio Oliver; y el candidato a la Alcaldía hispalense, Manuel Barrera, apostando por superar el modelo "fracasado" de movilidad de la capital andaluza, con medidas como el fomento de los transportes colectivos, reducir las necesidades de movilidad motorizada y eliminar 50.000 desplazamientos al año "potenciando el teletrabajo".
Durante este "paseo electoral" en el metro, según dicha formación, los miembros de la misma han evaluado los déficit del sistema metropolitano de transportes de Sevilla. En ese contexto, la comunicadora y activista social María Garzón, cabeza de lista de Actúa al Parlamento Europeo, opina que los actuales modelos de ciudad y sus sistemas asociados de movilidad "son depredadores de recursos, insostenibles en términos energéticos y deterioran la calidad de vida". Al respecto, ha llamado a pensar "en las más de 400.000 personas que mueren anualmente en la Unión Europea por razones relacionadas con la contaminación ambiental".
Garzón considera que entre las medidas imprescindibles que deben acometerse de manera inmediata figuran un modelo de transporte que reduzca las necesidades de movilidad motorizada, mejorando la accesibilidad y favoreciendo los modos y vías de comunicación para el transporte no motorizado, el transporte público colectivo con modelos de bajo impacto y los nuevos usos de colectivización del transporte privado. El objetivo, así, es "minimizar el impacto sobre el territorio, reducir drásticamente las emisiones de CO2 y disminuir la contaminación atmosférica y acústica".
OTRO MODELO
Por su parte, Tasio Oliver, candidato número dos por Actúa, recordó el impacto energético y contaminante del transporte por carretera y la necesidad de abordar con urgencia una renovación de los sistemas de transporte metropolitanos en Sevilla. El diagnóstico previo al Plan de Movilidad Urbana Sostenible de Sevilla, recogido por Europa Press, refleja en ese sentido que la ciudad hispalense soporta diariamente una media de casi 1,4 millones de desplazamientos, dentro de los cuales el coche privado copa el 40,5 por ciento de los viajes, lo que se traduce en una media de 399.284 vehículos privados al día por las calles de la capital, el 46,3 por ciento de ellos procedentes del exterior.
A juicio de Oliver, "esta centralidad del transporte por carretera no es ni razonable ni sostenible y genera unos impactos asociados que provocan un grave daño medioambiental, económico, contra la salud y laboral", avisando además de la "precariedad laboral asociada al transporte por carretera".
Actúa, en ese sentido, defiende la reducción progresiva del transporte por carretera y aéreo, mediante una moratoria a la construcción de grandes infraestructuras de transporte, seguida de "la deconstrucción" de algunas de las existentes, como pasos elevados o subterráneos, "nudos de transporte" o la reducción de carriles; la "supresión de las ventajas fiscales y subvenciones públicas de que gozan estos medios y la imposición a los mismos de tasas ambientales con carácter finalista, encaminadas a favorecer el cambio modal a otros medios de transporte".
"EL CIELO DE SEVILLA, DE LOS MÁS SUCIOS DE ESPAÑA: NECESITAMOS SUPRIMIR 50.000 DESPLAZAMIENTOS EN COCHE AL AÑO"
Por su parte, Manuel Barrera manifestó la necesidad de que estas consideraciones comunitarias aterricen al nivel de las políticas locales, "ya que el 76 por ciento de la población europea vive en ciudades con índices de contaminación por encima de lo saludable y Sevilla no sólo no se salva, sino que según Greenpeace es la ciudad de España con peor valoración en políticas de mejora de la calidad del aire, lo que supone un auténtico fracaso".
"Las soluciones no van a caer del cielo", añade Barrera, pues "del cielo de Sevilla sólo caerán partículas contaminantes si no tomamos medidas urgentes como cambiar el sistema de medición, restringir el tráfico, mejorar ya el sistema intermodal de transporte público, reforestar y revegetar la ciudad y eliminar 50.000 desplazamientos al año fomentando el teletrabajo, lo que se podría promover si el gobierno local fuera valiente".
