El acusado de matar con una escopeta y un cuchillo a su padre en Año Nuevo alega legítima defensa

Juicio con jurado popular
EUROPA PRESS
Actualizado: lunes, 5 julio 2010 19:41

SEVILLA, 5 Jul. (EUROPA PRESS) -

El joven acusado de matar a su padre el 1 de enero de 2008 en la localidad sevillana de Alcalá de Guadaíra utilizando para ello un cuchillo y una escopeta reconoció hoy los hechos pero alegó que lo hizo en legítima defensa, ya que su progenitor le quería clavar un cuchillo y le había amenazado de muerte tanto a él como al resto de la familia.

La Audiencia Provincial de Sevilla acogió hoy lunes la primera jornada del juicio con jurado popular contra A.D.P., para el que la Fiscalía de Sevilla solicita ocho años de prisión por un presunto delito de homicidio, mientras que su defensa, ejercida por el letrado Manuel Salinero, pide la absolución, ya que entiende que lo hizo en defensa propia y movido por un miedo "insuperable".

Durante su declaración, que se prolongó por espacio de más de una hora, el encartado explicó, antes de referirse a los hechos en sí, que su padre sufría una psicosis bipolar que le hacía estar unas veces "más deprimido" y otras "más excitado", precisando que, desde el verano anterior al fatal suceso, únicamente se tomaba la medicación por la mañana y no por la noche.

De igual modo, relató que, desde el mismo verano en que abandonó parcialmente la medicación, su padre comenzó a sacarse "todas las licencias de armas" existentes y a comprarse distintas armas --"que les daba la Guardia Civil"--, tales como tres escopetas de caza, un revólver, una pistola de aire comprimido e incluso una lanza, añadiendo que, con anterioridad al día de los hechos, protagonizó "muchos" altercados debido al trastorno bipolar que sufría y a la falta de medicación.

SITUACIÓN "TENSA" Y "ANGUSTIOSA"

"Mi padre cambiaba de ánimo súbitamente, todo lo cual había creado una situación tensa y angustiosa en la familia", según prosiguió el acusado, quien, visiblemente emocionado durante toda su declaración, pasó a referirse a los hechos desencadenados la noche de autos, el 31 de diciembre de 2007, cuando él, sus padres, su hermana y su novia se encontraban en el domicilio familiar.

Así, dijo que, en un momento dado, su progenitor señaló que los vecinos le habían despertado con los petardos y que, por ello, se iba a "vengar", por lo que salió al jardín "a disparar". Tras ello, y una vez se habían ido a dormir a sus dormitorios tanto su hermana como su novia, el acusado se dirigió al cuarto de baño, momento en el que escuchó "ruidos, voces y porrazos".

Todo ello motivó que el encartado se dirigiera nuevamente al salón, donde encontró a su padre encañonando con dos escopetas a su madre y diciendo "que la iba a matar", por lo que el procesado cogió otra escopeta ubicada en la casa y se fue a la cocina seguido de la víctima, momento en el que le disparó dos veces, lo que provocó que su progenitor soltara la escopeta y cogiera un cuchillo cortacabos del batín que en ese momento llevaba puesto.

FORCEJEO Y MUERTE

El acusado añadió que, tras ello, su padre se dirigió al salón con el cuchillo y él cogió un cuchillo jamonero que había en la cocina. Así, logró detenerlo en la puerta del salón, donde forcejearon cayendo ambos al suelo. Una vez en el suelo, la víctima perdió el cuchillo y cogió el jamonero que portaba su hijo por la hoja, intentando clavárselo "una y otra vez", lo que motivó que el acusado cogiera el cuchillo de su padre, que estaba en el suelo, y se lo clavara en dos ocasiones, lo que motivó su muerte.

Por su parte, el representante del Ministerio Público señaló que, en este caso, no se da la eximente completa de legítima defensa debido a la "falta" de proporcionalidad en el uso de armas, mientras que la defensa defendió la legítima defensa, pues su representado "actuó movido por un miedo insuperable" y con el objetivo "de salvar su vida y la de su familia", por lo que confió en que el jurado popular lo declare inocente y, así, "no se prolongue más el sufrimiento" de esta familia.