MADRID, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Agricultura y candidato del PP a las elecciones europeas, Miguel Arias Cañete, ve "evidente" que las instituciones de la UE fiscalizarán el uso de los fondos para formación de trabajadores, y ha avisado además de que una mala "imagen" puede "hipotecar" la capacidad de España para pedir futuras ayudas.
En una entrevista en Antena 3 recogida por Europa Press, Arias Cañete ha recordado que el Gobierno español está pidiendo ayudas de distintas líneas como parte del nuevo plan de apoyo europeo al empleo juvenil, de modo que "hay que ser muy cuidadoso en la gestión de los fondos".
La UE concede ayudas para la formación de trabajadores principalmente a través del Fondo Social Europeo y el ministro ha explicado que tanto el Parlamento Europeo como la oficina antifraude (OLAF) y el Tribunal de Cuentas están "con el ojo puesto en España" para ver cómo se han ejecutado esos fondos en las distintas comunidades autónomas que los han recibido.
Así, ha avisado de que si la UE detecta problemas "puede haber correcciones financieras y exigencias de devolución", que corresponderían no al Gobierno central sino a las comunidades autónomas afectadas. Y todo ello, ha dicho, se suma al problema de que los parados a los que iban destinados esos fondos para mejorar sus cualificaciones no reciben esa ayuda.
Por otro lado, preguntado por la situación de los jóvenes españoles que viajaron a Alemania en el marco del programa 'El empleo de mi vida', el ministro ha afirmado que le pedirá a la titular de Empleo, Fátima Báñez, que investigue a través de la Embajada española si se ha producido algún problema con ese programa "o es que se ha cubierto el cupo".
Arias Cañete se ha declarado "muy partidario de garantizar la libre circulación" de personas dentro de la UE y de "cumplir seriamente" con las obligaciones frontera exterior, "con respeto a los Derechos Humanos pero con mucha ayuda europea, porque no es igual la frontera exterior en Dinamarca que en Lampedusa o en Ceuta".
A su juicio, la UE debe ser consciente de esta situación y promover una inmigración controlada como Estados Unidos o Australia, con cupos para que los inmigrantes puedan acceder a un "trabajo ordenado" y a protección social.
