Arroceros denunciarán a la CHG por no haberles consultado en la venta de derechos de riego del Guadalquivir al Almanzora

Actualizado: miércoles, 6 septiembre 2006 21:33

SEVILLA, 6 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Federación de Arroceros de Sevilla acordó emprender medidas judiciales contra el organismo de cuenca, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, por no haber sido consultados en la operación de la compra de arrozales ubicados en la provincia de Sevilla por parte de los regantes de la comarca almeriense del Almanzora para llevarse el agua de riego que la CHG concede a las tierras sevillanas.

Según indicó a Europa Press el presidente de la Federación de Arroceros de Sevilla, Julián Borja, esta decisión fue tomada en la reunión que mantuvo anoche el Comité Permanente de la Federación de Arroceros, donde se acordó por unanimidad, a instancias de las comunidades de regantes afectadas por esta operación, pedir un informe jurídico para emprender medidas judiciales, que inicialmente se materializarán en la presentación de un contencioso administrativo.

Borja lamentó que en esta operación "las comunidades de regantes afectadas deben dar su 'placet' y visto bueno, pero esto no ha ocurrido en esta operación, no nos han consultado a nadie, e incluso algunas se enteraron por los medios de comunicación".

Las comunidades afectadas son la comunidad del Canal de Isla Mínima y las de la zona de la Marisma, entre otras.

Para el representante de los arroceros "existe un vacío jurídico y legal en la Ley", puesto que "hay dos situaciones diferenciadas, por un lado el propietario puede vender sus derechos de riego si una empresa o un particular tiene una concesión de riego personal, eso lo contempla la Ley, pero en este caso no se trata de una concesión personal, sino que la titularidad de los derechos de riego recae sobre una comunidad de regantes, que es la propietaria de dichos derechos".

"No se ha hecho de la forma en que debería haberse realizado, teniendo en cuenta que la titularidad del riego depende de una comunidad de regantes", lamentó Borja, que consideró que con esta operación "abrimos una puerta a la incertidumbre".

Mostró además el malestar del sector arrocero y el total desacuerdo de estos productores "pues si se ha iniciado este tipo de ventas no sabemos si podrá continuar con esta práctica, en la que no nos han consultado".

CUENCA DEFICITARIA

Ademas recordó que el sector arrocero en Sevilla capta su agua en el tramo final del Guadalquivir, "una zona muy sensible donde tenemos que compatibilizar el agua buena con el agua del tapón salino". "Toda cantidad que se detraiga de la zona arrocera produce un aumento de salinidad sobre todo en las últimas tomas del sector arrocero", añadió.

"La CHG es la responsable y la que tiene que estar presente en estos acuerdos", agregó Borja, que denunció la "tropelía" en esta operación "donde han pasado por encima de las comunidades de regantes, que son las que reparten el agua".

Para los arroceros sevillanos "se ha desvirtuado la ley y no tiene lógica que se permita este tipo de operaciones en una cuenca deficitaria como es la del Guadalquivir y en un año como el actual, no es el momento adecuado".

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, adelantó ayer en Huércal Overa (Almería) que "en breve se firmará la autorización para que los derechos del agua de la cuenca del Guadalquivir puedan ser utilizados en la cuenca del Almanzora".

La sociedad Aguas del Almanzora ha adquirido 1.600 hectáreas, en su mayoría a la familia sevillana Hernández Barrera, la fundadora de la arrocera Herba y hoy principal accionista de la empresa agroalimentaria Ebro Puleva, por más de 40 millones de euros. Esa superficie representa casi el cinco por ciento de todo el arrozal existente en las marismas sevillanas.