SEVILLA, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -
El sindicato CCOO ha advertido de que el "hacinamiento" de enfermos en las áreas de urgencia de los hospitales de Sevilla --y, en especial, en el Hospital Virgen Macarena-- ha sido atribuido por los portavoces del Servicio Andaluz de Salud y de la Consejería de Salud a la epidemia de gripe A, una afirmación que, a su juicio, "encubre la política de recortes de camas que se ha llevado a cabo en la sanidad pública de Andalucía".
"La epidemia de gripe A no es un fenómeno imprevisible: todo lo contrario. No hace falta ser doctor en epidemiología para saber que en esta época del año miles de personas se verán afectadas por esta enfermedad respiratoria y que muchas de ellas --sobre todo si sufren patologías previas-- se verán obligadas a acudir al hospital. Y un porcentaje de ellas necesitarán ingreso hospitalario", manifiesta a través de un comunicado el sindicato, que señalan que "es la imprevisión de los responsables de la Consejería de Salud la que ha llevado a nuestros hospitales a esta saturación que lleva a los pacientes a situaciones intolerables, pudiendo pasar días enteros en un pasillo o en un sillón en observación".
En efecto, según datos publicados por la propia Consejería de Salud, los hospitales de Sevilla han sufrido "una importante reducción" del número de camas entre los años 2007 y 2010, pasando de 3446 camas a 3198 (es decir, 248 camas menos, una reducción del 7%). "Cuando las áreas de observación de urgencias del hospital se saturan, faltan camas en las plantas porque se han cerrado camas. Y desde 2011 el número de camas ha seguido cayendo, tanto en los hospitales del SAS como en el Hospital del Aljarafe, como consecuencia de los recortes".
Además, afirma que "no es de extrañar" que sea el Hospital Virgen Macarena el que "más se vea afectado por la situación", siendo el que "más camas redujo en este periodo, pasando de 985 a 827, una reducción del 18 por ciento". "Sólo una institución hospitalaria pública de Sevilla ha aumentado el número de camas: el Hospital Psiquiátrico Penitenciario, que pasó de 180 a 183 camas. Pero este Hospital no depende de la Consejería de Salud, sino de Instituciones Penitenciarias", añade.
"Si a la falta de camas unimos los recortes de plantilla, la falta de cobertura de las bajas y demás ausencias del personal, nos vemos obligados a llegar a una conclusión: se están cargando la asistencia sanitaria pública". En este sentido, agrega que "la mentalidad recortadora del Gobierno andaluz queda demostrada por le hecho de que la antigua consejera de Salud, responsable de este atentado contra la sanidad pública, haya sido ascendida a Consejera de Hacienda y responsable, por tanto, de todas las cuentas de la Junta", toda vez que señala que "se ha estrenado reduciendo este año un dos por ciento más el presupuesto del SAS".
