CARMONA (SEVILLA), 6 Nov. (EUROPA PRESS) -
El alcázar de la Puerta de Sevilla, uno de los principales activos patrimoniales del antiguo recinto defensivo de Carmona al atesorar restos arquitectónicos que se remontarían a las civilizaciones cartaginesa y romana, está siendo liberado del andamiaje y el cinturón de hormigón armado instalado con motivo de sus recientes obras de consolidación. Tal extremo constituye el final de estas primeras labores de consolidación del monumento y abren la puerta a futuros trabajos de restauración en el conjunto de torres y murallas.
Estas labores de consolidación están siendo promovidas gracias a la colaboración del Ayuntamiento, gobernado por Antonio Cano (PSOE), la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía y el Ministerio de Cultura, toda vez que la primavera de 2009, el Gobierno andaluz promovía ya obras de emergencia en dos de los muros del monumento dadas las fisuras y deformaciones descubiertas en la construcción del enclave defensivo.
Tras el desmantelamiento del andamiaje y del cinturón de hormigón, las autoridades prevén afrontar la fase de restauración del alcázar de la Puerta de Sevilla comenzando por inyecciones en los pies de apoyo de las torres para mejorar la capacidad portante del suelo, según la información del Ayuntamiento recogida por Europa Press. Posteriormente, la muralla del conjunto será remozada con la reposición de piedras y sillares, el rejuntado de llagas y el tratamiento final de esta parte del monumento.
Las obras en la Puerta de Sevilla, como se ha informado, se iniciaron el año pasado con la consolidación inicial de la base del muro a través de un cinturón de hormigón y la construcción de una estructura metálica provisional, elementos que son los que se están retirando en la actualidad. A continuación, se realizó un amplio estudio de la situación geotécnica del edificio histórico y de su base, así como de los materiales de construcción.
Los historiadores defienden que ya los cartagineses elevaron un baluarte sobre una primitiva construcción anterior en lo que actualmente constituye el alcázar de la Puerta de Sevilla. Ya bajo la dominación romana, el conjunto defensivo habría sido reforzado confiriendo al baluarte parte de la imagen que actualmente conserva, pues los romanos habrían erigido un podio y un templo para, ya en el siglo I después de Cristo, someter al conjunto a nuevas intervenciones. Los almohades primero, y los cristianos después, acometieron diversas intervenciones sobre el monumento.
