SEVILLA, 23 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los dueños o responsables de los 12 bares de copas del barrio del Arenal y de la Alameda de Hércules precintados por la Policía Local durante el último fin de semana, la mayoría de ellos por las personas que consumían alcohol en zonas de vía pública aledañas a tales negocios, han acudido este martes al pabellón de la Madrina, sede de la delegación municipal de Medio Ambiente, para protestar por las medidas adoptadas contra ellos, toda vez que al menos tres de estos negocios han anunciado que se les habría levantado el precinto.
Como hemos informado, merced a 117 inspecciones realizadas entre el jueves y el domingo por la Policía Local y los servicios municipales en bares del Arenal, la calle Julio César, la avenida de los Reyes Católicos, el Paseo de Colón y la Alameda de Hércules, diferentes negocios han sido objeto de 37 partes de denuncia y 12 precintos. Entre los bares precintados figuran La Boheme, Magallanes, Casa Matías, Arfe 11, el Gallo Negro, y La Jolla, en el Arenal, y El Corral de Esquivel, El Hombre Bala, Eureka y Café de Arte en la Alameda.
Mientras el Sindicato Profesional de Policías Municipales de España (Sppme) ha denunciado "presiones" para ejecutar el cierre directo de los bares infractores en lugar de adoptar medidas disuasorias, el Ayuntamiento alega que estos negocios contaban con numerosas denuncias previas y habrían sido avisados de las consecuencias de sus infracciones incluso el día antes del cierre.
MOVILIZACIONES
Lo cierto es que este mismo martes, los dueños o responsables de los bares de copas precintados este último fin de semana, al menos la mayoría de ellos, ha acudido al pabellón de la Madrina, sede del área municipal de Medio Ambiente, para protestas por estas medidas, pues como han manifestado a Europa Press algunos de los dueños de estos bares, el Ayuntamiento podría estar actuando con un "doble rasero" según el cual las medidas serían dirigidas sólo "contra unos bares" concretos y no contra la totalidad de los negocios infractores.
Según los portavoces de estos bares, con el criterio puro y duro de la prohibición de consumir alcohol en la vía pública, "muy pocos bares se salvarían de la quema", porque para los trabajadores de los negocios de hostelería resulta "muy complicado" controlar qué hace cada cliente del establecimiento una vez adquiere una bebida. Los propietarios de estos negocios, de cualquier modo, han acordado contratar los servicios del abogado Juan Isidro Fernández y constituir "una plataforma".
PIDEN "TRATO PO IGUAL"
Los dueños de estos negocios habrían trasladado estos extremos a los responsables del área municipal de Medio Ambiente, negando que antes de las órdenes de precinto mediase un aviso directo de las consecuencias de sus infracciones. "Reclamamos un trato por igual para todos, no desigualdades", manifestaba uno de los propietarios considerando que los precintos de este último fin de semana responden a una "orden política" para contentar a los vecinos que promueven las denuncias contra estos negocios, quienes han aplaudido las medidas y corroboran el carácter reincidente de estos bares.
De cualquier manera, los bares de copas La Jolla, El Hombre Bala y el Corral de Esquivel han anunciado que el Ayuntamiento les habría levantado el precinto y les habría autorizado a reiniciar la actividad, aunque en todos estos casos con las correspondientes sanciones económicas por las infracciones detectadas, toda vez que mediaría un cuarto levantamiento de precinto y el viernes podrían ser dictadas las restantes ocho resoluciones, si bien no todas ellas implicarían el levantamiento del precinto.
