"Grito de denuncia" de Cáritas ante la "cronificación de la pobreza" y la "creciente desigualdad"

Presentación de la memoria 2013 de Cáritas.
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 17 junio 2014 14:13

La organización atiende a 75.214 personas durante 2013 y alerta del anclaje de la pobreza en las clases más castigadas por la crisis

SEVILLA, 17 Jun. (EUROPA PRESS) -

Cáritas Diocesana de Sevilla atendió durante a 2013 a un total de 75.214 personas pertenecientes a 21.059 familias frente a las 63.457 personas de 26.728 familias atendidas en 2012, contabilizando durante 2013 un total de 111.604 intervenciones sociales frente a las 84.902 actuaciones de 2012. Con estos datos sobre la mesa, la organización huye del discurso de la recuperación y lanza un "grito de denuncia" ante la "cronificación de la pobreza".

El director de Cáritas Diocesana de Sevilla, Mariano Pérez de Ayala; la secretaria general, Auxiliadora González; y el delegado episcopal de Cáritas, Francisco Ortiz, han celebrado este martes una rueda de prensa para dar cuenta de la memoria de la organización correspondiente al año 2013.

Un año, como hemos señalado, en el que Cáritas, con 79 trabajadores y 2.540 voluntarios, atendió a 75.214 personas de 21.059 familias y realizó 111.604 intervenciones sociales. La memoria de la organización, en ese sentido, pone de relieve que entre 2010 y 2013, se ha incrementado un 23,62 por ciento el número de personas atendidas, mientras el número de intervenciones se ha elevado un 56,69 por ciento en el mismo periodo.

En paralelo, la inversión de Cáritas Diocesana de Sevilla en materia de atención primaria a los desfavorecidos alcanzó en 2013 los 3.045.340 euros, subiendo un 34,73 por ciento respecto a 2012. De estos 3.045.340 euros, la ayuda en materia alimenticia rozó los 1,44 millones de euros, mientras el respaldo en el pago de recibos supuso un coste de 624.034 euros, el apoyo económico para hacer frente al alquiler o la cuota de la hipoteca llegó a los 425.840 euros y las ayudas para productos sanitarios 161.170 euros.

"GRITO DE DENUNCIA"

En ese sentido, los responsables de Cáritas Diocesana de Sevilla han lanzado un rotundo "grito de denuncia ante la gravedad de los datos", pues en un contexto en el que "casi un tercio" de las personas atendidas lleva ya unos tres años siendo objeto de ayuda, parece clara la "cronificación de la pobreza". "La crisis la pagan los de siempre, más unos segmentos de la población que antes se situaban en las clases medias", han señalado en cuanto a la "creciente desigualdad" social que la crisis está ocasionando.

Los responsables de Cáritas han manifestado además que en un escenario de crecientes necesidades sociales, las administraciones han reducido su "gasto social", así como su inversión en recursos educativos y sanitarios, extremo que han considerado contradictorio al tratarse de aspectos de mayor demanda en un momento en el que se desploman las economías familiares. Incluso han advertido de una "dinámica" según la cual los servicios sociales comunitarios de las administraciones "derivan" hacia Cáritas a muchas personas que acuden a estos dispositivos de atención social.

"La sociedad civil no puede asumir la labor de los poderes públicos", han enfatizado en cuanto al ejercicio de "políticas que corresponde poner en marcha a las administraciones" y en las que Cáritas debe ser un apoyo y no una parte principal. En cuanto al perfil de las personas que acuden a Cáritas, han hablado, sobre todo, de "parados de larga duración", con todas las prestaciones ya agotadas, y del papel de las "pensiones de los abuelos" como único sustento de familias enteras, mencionando por cierto cómo la "precariedad" laboral obliga a acudir a Cáritas a personas que cuentan con alguna retribución económica relacionada con el trabajo.

MENSAJE DE "ESPERANZA"

Todo ello, han dicho como mensaje de "esperanza", en un momento en el que las subvenciones de las administraciones a Cáritas constituyen sólo el 25 por ciento de la financiación, pero el restante 75 por ciento corresponde a las aportaciones de las comunidades cristianas o donaciones y legados, pues por ejemplo los ingresos de Cáritas Diocesana de Sevilla pasaron de los poco más de seis millones de euros de 2012 a 8,2 millones de euros en 2013 gracias a dos "donaciones extraordinarias muy importantes". La sociedad, según aseguran, afianza su solidaridad en momentos como los que vivimos.