Junta, Subdelegación y Ayuntamiento debaten hoy el destino del nuevo poblado chabolista

Actualizado: martes, 2 junio 2009 8:11

SEVILLA, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -

Dirigentes de las delegaciones provinciales de varias consejerías de la Junta de Andalucía se reunirán hoy con responsables de la Subdelegación del Gobierno y del Ayuntamiento de Sevilla para articular la actuación que se desplegará en el poblado chabolista instalado entre el puente de la Juan Carlos I y el puente de hierro que conecta San Juan de Aznalfarache con Sevilla, un asentamiento creado por familias del Polígono Sur que abandonaron la zona tras el tiroteo en el que murió un menor de 17 años víctima de una bala perdida.

Fuentes de la Delegación del Gobierno andaluz en Sevilla informaron a Europa Press de que a la reunión, convocada en la sede de esta institución, asistirán la propia responsable de este departamento, Carmen Tovar, el subdelegado del Gobierno en Sevilla, Faustino Valdés, la delegada municipal de Bienestar Social del Ayuntamiento hispalense, Emilia Barroso, el jefe provincial de la Unidad de la Policía Nacional adscrita a la Junta de Andalucía, y los delegados provinciales de las consejerías de Salud, Francisco Cuberta, Educación, José Jaime Mougán, Vivienda y Ordenación del Territorio e Igualdad y Bienestar Social.

Recientemente, como antesala de esta futura actuación, un equipo de técnicos de la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio visitó el asentamiento chabolista para esclarecer en qué circunstancias sus actuales moradores habitaban las viviendas del Polígono Sur abandonadas como consecuencia del tiroteo que el pasado 29 de marzo se saldó con la muerte de un menor de etnia gitana de 17 años por una bala perdida.

Este equipo de técnicos se entrevistó con los moradores de las chabolas y jaimas que pueblan esta finca para interesarse por las condiciones en las que habitaban las citadas viviendas del Polígono Sur, actualmente precintadas después de que estas familias, en su mayoría de etnia gitana, las abandonaran por temor a represalias por la muerte de este menor en el marco del mencionado tiroteo. Los técnicos, así, interrogaron a estas personas sobre la posesión o no de documentación que acreditase su relación con estas viviendas cuyo propietario final es la Administración andaluza.

UNA BALA PERDIDA

Varias familias arraigadas en el entorno del barrio marginal de las Tres Mil Viviendas huyeron de la zona por temor a "represalias" como consecuencia del tiroteo que el pasado 29 de marzo se saldó con la muerte de un menor de etnia gitana de 17 años en la calle José Sebastián Bandarán, donde una bala perdida alcanzó en la cabeza al menor mientras presenciaba el intercambio de disparos desde un todoterreno manejado por su propio padre.

Estas familias abandonaron el Polígono Sur prácticamente al día siguiente de que se produjera este tiroteo entre clanes de etnia gitana, si bien la muerte del menor no aconteció hasta días más tarde en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Virgen del Rocío a consecuencia de las lesiones craneoencefálicas derivadas del impacto de bala. Se da la circunstancia de que uno de los clanes que habría participado en el tiroteo, actualmente investigado por el Grupo de Homicidios del Cuerpo Nacional de Policía, está formado por algunas de las personas que aterrizaron en el Polígono Sur tras el desmantelamiento del asentamiento chabolista de Los Bermejales.