SEVILLA, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un jurado popular ha declarado culpable por unanimidad al hombre acusado de acabar con la vida de su exmujer tras asestarle una decena de puñaladas, delante de su hijo de seis años, en junio de 2017 en la barriada de Palmete en la capital hispalense; de herir de gravedad a una prima de la víctima y de robar una bicicleta a un menor de 12 años con la que huyó del lugar.
Durante la lectura del veredicto realizada este miércoles por la tarde en la Audiencia Provincial de Sevilla, el jurado considera probado por unanimidad que este hombre, autor confeso de los hechos, acudió aquel 24 de junio de 2017 a la barriada, al conocer que su exmujer se encontraba en casa de su prima, donde las esperó "agazapado entre dos coches", saltándose una orden de alejamiento, y le asestó una puñalada en el abdomen a esta familiar con alevosía y con la intención de causarle la muerte cuando ésta se encontraba indefensa.
Tras ello, el jurado, compuesto por cinco mujeres y cuatro hombres, considera probado por unanimidad que persiguió a su exmujer, que salió corriendo con su hijo de seis años, intentando huir, y que se refugió en una cochera, donde el acusado la alcanzó y le asestó hasta diez puñaladas, tres de ellas mortales, con ensañamiento y "de forma inhumana".
A su vez, ve probado que "lo hizo incrementando el dolor de la víctima e intentando aumentar su sufrimiento", dándose a la fuga acto seguido tras apoderarse de la bicicleta del menor, un acto que el jurado cree que hizo con intimidación pero sin violencia y sin esgrimirle el cuchillo.
También considera probado que este hombre, sobre las 21,00 horas, se personó en una comisaría de Policía donde confesó a los agentes que había apuñalado a su expareja.
Este veredicto ha sido emitido por un jurado que ha tenido que deliberar de nuevo este mediodía después de que durante la mañana el juez devolviera el acta del citado veredicto por falta de argumentación en algunas partes.
HASTA 46 AÑOS DE PRISIÓN
La Fiscalía pide para este hombre, que en el último día del juicio pidió perdón a la familia de su exmujer y a sus hijos por lo que había hecho, 15 años de prisión por un delito de homicidio con la agravante de parentesco y de género y 14 años de cárcel y la prohibición de acercarse a menos de 500 metros y de comunicarse durante 24 años con la mujer, prima de la fallecida, a la que apuñaló de gravedad por un delito de asesinato en grado de tentativa. Además de tres años por el robo con violencia o intimidación y un año de cárcel por un delito de quebrantamiento de medida cautelar con la agravante de reincidencia.
La acusación particular, que representa los intereses de la familia de la fallecida, pide 46 años de prisión y una indemnización de 542.000 euros mientras que su defensa, que ha insistido en la atenuante de confesión inmediata en la comisaría de Policía de Nervión, pide entre 26 y 28 años de años por los delitos de homicidio, de tentativa, de hurto y por el quebrantamiento y que dicte una sentencia "conforme a derecho". El juicio ha quedado visto para sentencia.
