SEVILLA, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Sevilla juzgará hoy martes a un hombre de nacionalidad ecuatoriana, identificado como W.E.S., para quien la Fiscalía solicita 18 años y siete meses de prisión por supuestamente agredir e incumplir una orden de alejamiento para agredir sexualmente a su ex pareja, a la que supuestamente violó estando sus dos hijos en las habitaciones contiguas.
Según relata el Ministerio Público en su escrito de acusación, consultado por Europa Press, el procesado contrajo matrimonio en su país de origen con la presunta víctima, L.A.P., con la que tuvo dos hijos, añadiendo que en noviembre de 2006, una vez ya estaban en España y tras una discusión, el procesado agredió a su esposa dándole una patada en la pierna.
Asimismo, explica que el 19 de enero de 2007 se produjo una nueva discusión y el encartado golpeó a su pareja, unos hechos que motivaron que la mujer interpusiera una denuncia, dictando el Juzgado de Violencia sobre la Mujer orden de alejamiento. No obstante, la presunta víctima renunció a esta medida, volviendo a convivir la pareja hasta febrero de 2009, cuando L.A.P. decidió poner fin a la convivencia, marchándose el acusado de la vivienda.
Al hilo de ello, relata que en marzo de 2009, y en presencia del hijo menor de la pareja, esta coincidió en una parada del autobús, momento en el que la mujer aprovechó para pedirle al procesado unos CDs que aquel se llevó al marcharse del domicilio, respondiendo el acusado "de forma agresiva" y abofeteándola. En esta situación, la presunta víctima cogió un teléfono para llamar a la Policía mientras su ex pareja le golpeaba para que no lo hiciera, algo que no consiguió.
Tras ello, el Juzgado de Violencia sobre la Mujer prohibió al procesado acercarse a su ex mujer, a pesar de lo cual, en mayo de 2009, llegó al domicilio de L.A.P., donde la golpeó y la agredió sexualmente, todo ello mientras los dos hijos de ambos permanecían en sus habitaciones.
Por todo ello, la Fiscalía pide para el acusado 18 años y siete meses de cárcel por un presunto delito continuado de agresión sexual; uno de maltrato habitual; tres delitos de lesiones; uno de maltrato; otro de amenazas y un último delito continuado de quebrantamiento de medida cautelar. Además, pide que pague a la víctima 360 euros por las lesiones sufridas y otros 18.000 euros por los perjuicios morales sufridos.
