"Las limitaciones de los políticos son los propios políticos", señala un experto en oratoria

El 'coach' Valentín Escribano
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 8 julio 2015 16:40

CARMONA (SEVILLA), 16 Jul. (EUROPA PRESS) -

El 'coach' y experto en Comunicación y Oratoria Valentín Escribano ha asegurado este miércoles que "las limitaciones de los políticos en el ámbito de la oratoria son los propios políticos, que defienden creencias e ideologías sin ni siquiera planteárselas".

Escribano ha hecho estas declaraciones en el marco del curso 'Aplicación del coaching a la actividad política' que se está desarrollando en los cursos de verano que la Universidad Pablo de Olavide (UPO) organiza en Carmona (Sevilla).

"La sociedad no es apática en sí. Protesta, se indigna, llora cuando no llega a fin de mes y va a la playa. La sociedad pierde valores. Los ciudadanos pierden la confianza en el político o en la utilidad de su voto", indica el 'coach'.

Añade que, sin embargo, a la sociedad "le gusta echar culpas a los políticos, aunque no siempre la tengan: la transformación consiste en recuperar la confianza, y esto puede hacer a través de la comunicación dirigida desde las emociones", ha añadido.

"Además, la sociedad debe verse como responsable de determinadas cuestiones. Debe haber cambios, pero cambios basados en algo, propuestas con fundamentos. Hay que transformar desde la oratoria", según Escribano, que ha agregado que "la barrera que impide hablar en público es la falta de confianza, la inseguridad o la falta de conocimiento".

Para Escribano, "una persona sin estudios puede llegar a convencer más que una preparada". "Quintiliano obliga a no dejar de estar nunca en el camino del aprendizaje, pero es cierto que una persona sin estudios puede transmitir más, solo tiene que tocar las emociones", ha declarado, manifestando que "también es cierto que personas preparadas pueden llevar a la sociedad o a un grupo al precipicio".

EL 'COACHING' "NOS LLEVA POR EL CAMINO PARA SER MEJORES"

Subraya el experto en Comunicación que "los discursos de los políticos deberían salir de dentro, pero no dejarlo a la improvisación porque el orador debe ser ordenado, tener una estructura: inicio, desarrollo y final enfocado a un objetivo".

"En todas las épocas ha habido grandes oradores, pero destacan los años del 400 al 300 a.C. porque convivieron Sócrates, Platón y Aristóteles, y en la Roma clásica, Quintiliano. También el compendio de oradores de Cicerón, además de los filósofos griegos y otros políticos romanos", explica.

Más cercano, añade, destaca Hitler, "muy persuasivo aunque con valores poco apropiados". También sobresale Javier Arenas dentro del PP, quien "siempre mantenía un nivel de atención muy alto en el público"; Obama, con su discurso enfocado hacia las emociones; Mujica, con su tranquilidad; Eduard Punset, Antonio Gala o Jesús Quintero, según le han comentado sus propios alumnos en más de una ocasión.

Bajo su criterio, "los oradores que gritan llevan a la acción, al principio activan, pero luego se medita y es mejor un discurso pausado". "La importancia de la oratoria dentro del 'coaching' es conseguir vender tu marca personal a alguien, pero luego la labor consiste en quedarse callado y, a veces, preguntar. Solo sirve para venderse en público", reconoce.

"Es fácil hacer de 'coach': entrenas ojos, orejas y preguntas poderosas. Mucha gente se apunta y ejerce. Cada vez el mercado demanda más, pero de todas formas no es capaz de absorber la oferta: cada vez se va a pedir un 'coaching' de más calidad pero, aún así, cuantos más 'coaches' mejor para la sociedad, aunque no se ejerza", comenta frente a la posibilidad de 'burbuja'.

Por último, ha destacado que "el 'coaching' nos lleva por el camino del aprendizaje para ser mejores, y ése es el gran beneficio de esta formación, aunque no se convierta en profesión".