Salud confía que en los próximos dos años todos los centros tengan placas solares para obtener energía limpia

Actualizado: lunes, 1 junio 2009 14:06

SEVILLA, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -

La consejera de Salud, María Jesús Montero, confió hoy que "a lo largo de los próximos dos años" la "totalidad" de los centros del sistema sanitario público andaluz dispongan de plantas solares que les permita autogenerar su propia agua caliente para uso sanitario.

En declaraciones a los periodistas tras visitar los panales solares del Hospital Virgen Macarena de Sevilla, Montero explicó que uno de los principales objetivos del nuevo modelo de gestión de residuos y política de gestión medioambiental se centra en el uso de energías alternativas y renovables que, como en el caso del Macarena, "nos permite que más de un 70 por ciento del agua caliente sanitaria se pueda sanear a partir de paneles solares".

La titular del ramo, que admitió que este objetivo supone "un reto" para su departamento, señaló con todo que el 60 por ciento de los hospitales públicos ya se han incorporado a este red de plantas solares, lo que ha permitido también reducir la emisión a la atmósfera de unas 1.800 toneladas de CO2 al año, el equivalente al CO2 que emiten más de 3.300 coches al año o lo que absorbe un bosque de 90.000 árboles.

"Nuestra intención, en conjunto con la Consejería de Innovación, es intentar que a lo largo de los próximos dos años la totalidad de nuestras instalaciones tengan plantas solares, que les permita autogenerar el agua caliente sanitaria y con lo que ello implica de disminución de energía tradicional", enfatizó.

De hecho, en el caso del Hospital Macarena la nueva instalación de energía solar térmica permitirá reducir aproximadamente un 70 por ciento del consumo de energía destinada a agua caliente sanitaria, al tiempo que también posibilitará disminuir la emisión anual de CO2 en 230 toneladas.

En este caso, la instalación cuenta con 2.000 metros cuadrados de superficie, divididos entre el Hospital Virgen Macarena y el de San Lázaro. Puesta en marcha por las consejerías de Innovación, Ciencia y Empresa y Salud, está telegestionada por un sistema de control inteligente que favorece el óptimo aprovechamiento de la energía solar disponible en cada momento, controlando el funcionamiento de cada uno de los elementos.

En concreto, el Hospital Macarena cuenta con un total de 412 placas y toda la energía recibida a través de estas es transmitida a cuatro depósitos con capacidad de almacenaje total de 60.000 litros de agua, que supone un ahorro de emisiones a la atmósfera de 207 toneladas de CO2.

Por su parte, el Hospital de San Lázaro cuenta con un total de 48 placas y la energía recibida es transmitida a un depósito de 8.000 litros de capacidad, y supone un ahorro de emisiones de CO2 de 23 toneladas anuales.

Asimismo, todos los centros del sistema sanitario público andaluz incluyen, entre sus objetivos de ahorro energético, la sustitución progresiva del sistema de iluminación convencional a sistemas de bajo consumo. Igualmente, las reformas desarrolladas en los centros incluyen actuaciones de mejora en los aislamientos de los edificios.

NUEVO SISTEMA PARA RECICLAR PAPEL Y ENVASES LIGEROS

Montero explicó que los hospitales públicos se han incorporado a un nuevo modelo de gestión de residuos dentro de su política de gestión medioambiental, que permitirá incrementar la eficacia y seguridad en el tratamiento de estos materiales y, especialmente, de los envases ligeros y papel desechado por los centros. Se estima que los centros hospitalarios generan anualmente cerca de 3.000 toneladas de papel y 500 de envases ligeros.

Esta medida está impulsada por el Sistema Integral de Gestión Medioambiental y enmarcada en la Ley de Fomento de las Energías Renovables, al igual que las nuevas instalaciones solares térmicas de los centros hospitalarios.

En concreto, este modelo de gestión de residuos se ha puesto en marcha este año por primera vez, y entre las novedades destaca la incorporación en los centros hospitalarios andaluces a equipos de recogida de papel y cartón, que van desde contenedores especiales para puntos de pequeña producción a autocompactadoras de papel y cartón con capacidad superior a los 20 metros cúbicos. Se prevé instalar 25 de estas autocompactadoras y 448 contenedores para recogida de cartón.

Igualmente, se desarrollará la recogida selectiva de envases ligeros (bricks, envases no peligrosos, plásticos y latas, entre otros), generados fundamentalmente por las cocinas de los centros. Para ello, se han distribuido en los centros un total de 455 contenedores específicos.

NUEVAS MEDIDAS PARA RESIDUOS PELIGROSOS

Junto a estas medidas para material reciclable, se han establecido nuevos criterios en la gestión de residuos peligrosos como el incremento en la frecuencia de recogidas de material y la seguridad en el transporte. De esta forma, los centros hospitalarios de mayores dimensiones incrementarán de tres a cuatro el número de recogidas semanales y se realizarán recogidas urgentes en menos de 12 horas en caso de necesidad.

"Estamos en este momento sometiendo al conjunto del sistema sanitario público a un plan de residuos en el que se invertirá más de ocho millones de euros", concluyó.