Sevilla.- Los arquitectos del plan parcial del Alcázar entregan hoy al alcalde el documento de avance

Actualizado: viernes, 6 febrero 2009 6:09

El arquitecto Vicente Llanos asegura que no se propone "ninguna barbaridad" para el patio de Banderas

SEVILLA, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

Los arquitectos Rafael Bermudo y Vicente Llanos entregarán hoy al alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, el avance del Plan Especial de Protección del sector urbano que rodea al conjunto defensivo y palaciego de los Reales Alcázares, declarado Patrimonio de la Humanidad, un documento destinado a recoger los antiguos trazados históricos, catalogando además los elementos y vestigios dignos de conservación y proponiendo intervenciones arqueológicas en espacios singulares como el Patio de Banderas o los jardines del conjunto.

El acto se celebrará en el propio Ayuntamiento y contará con la presencia del alcaide del Real Alcázar, Antonio Rodríguez Galindo, quienes recogerán de manos de ambos arquitectos este documento de avance que contiene una memoria informativa de aproximadamente "400 páginas" sobre los valores históricos y patrimoniales de los aledaños de Los Reales Alcázares y el barrio de Santa Cruz. Esta herramienta de conservación y planeamiento, cabe recordarlo, fue bautizada como 'Plan Especial de Protección del Sector 6 del Conjunto Histórico de Sevilla: Real Alcázar'.

El documento contiene un catálogo exhaustivo en cuanto a los activos patrimoniales que pueblan el barrio de Santa Cruz y los aledaños de los Reales Alcázares, pues el entorno sometido a estudio comprende hasta la plaza del Triunfo, la calle Joaquín Romero Murube y la Plaza de Alfaro al norte; al este hasta la calle Mariscal, al sur hasta la avenida de Menéndez y Pelayo, la antigua Pasarela y la calle San Fernando y al oeste hasta la calles San Gregorio, Mariana de Pineda, Deán de Miranda y la Plaza de la Contratación.

Consiste, así, en una catalogación rigurosa de los elementos arquitectónicos, espacios urbanos, edificios y elementos significativos que, por su tipología e historia, deben ser objeto de mantenimiento y puesta en valor, agregando además un estudio sobre la capacidad de transformación de cada uno de ellos, según informaba a Europa Press Vicente Llanos Siso.

Por eso, contempla "interpretaciones arqueológicas" y "propuestas encaminadas a posibilitar excavaciones" que recuperen el legado histórico que guarda el subsuelo de la zona, "principalmente" el patio de Banderas y la basílica visigótica que yace debajo y los jardines de los Reales Alcázares, que ya en otras ocasiones han sido escenario de hallazgos que revelan el asentamiento almohade que habría poblado este entorno siglos atrás. En cuanto a la polémica suscitada acerca del futuro del Patio de Banderas, Llanos Siso dijo a Europa Press que no se propone "ninguna barbaridad".

Antonio Rodríguez Galindo ya había asegurado que este histórico y popular espacio no será demolido para las investigaciones arqueológicas, puesto que las catas se llevarían a cabo en un área no pavimentada de la plaza al objeto de enlazar las excavaciones acometidas en 1976 y 1999.

DELIMITAR EL BIEN DE INTERÉS CULTURAL

El objetivo del plan, cuyo avance será sucedido por un documento de aprobación provisional que habrá de ser refrendado definitivamente, es delimitar con exactitud dentro de la trama urbana del histórico barrio de Santa Cruz el recinto del Real Alcázar, identificando así las fincas concretas afectadas por la protección de Bien de Interés Cultural (BIC) y las condiciones que pesan sobre cada una de ellas.

El trabajo de los arquitectos incluye además una investigación histórica y un capítulo arqueológico que identifique los trazados de las diferentes fases vividas por la antigua ciudad en su andadura por la Historia, prestando especial atención a la evolución del recinto amurallado y la ubicación de sus monumentos. El documento definitivo, asimismo, debe contemplar propuestas para la articulación de medidas de protección de los valores paisajísticos y los perfiles urbanos del tradicional barrio de Santa Cruz, recogiendo igualmente las condiciones a las que deben someterse los proyectos de construcción de edificios de nueva planta para su integración en el entramado urbano.