SEVILLA, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Ecologista Alwadi-ira y Ecologistas en acción, han denunciado ante el Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra (Sevilla), la Delegación Provincial de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) y el Servicio de Protección de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) la aparición de vertidos de escombros en los arroyos de La Fuensanta, Los Ángeles y Retama.
En un comunicado, los ecologistas aseguraron que en el lugar conocido como La Retama, en un pequeño olivar que se encuentra a la izquierda del camino de Torrondo a Los Ángeles, están siendo vertidas "innumerables" cubas de escombro. Asimismo, concretaron que "buena parte" de las cuales se están depositando sobre el antiguo cauce del arroyo de La Fuensanta y sobre una arroyada proveniente del camino de Los Ángeles.
En esa línea, precisaron que dichos escombros podrían provocar en épocas de lluvias "graves daños y perjuicios", tanto en los caminos públicos de la zona como en el río Guadaíra ya que, dada su cercanía, "todos los materiales depositados acabarán siendo arrastrados hacia su cauce". "Esto provocaría un más que probable deterioro de la fauna y del patrimonio ligado al río", aseveraron.
Seguidamente incidieron en que, por la disposición de los escombros y su "gran cantidad", es posible que existan "intereses urbanísticos y/o especulativos" en una zona que, según el vigente Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), "no tiene previsto usos residenciales ni industriales".
A este respecto, señalaron que en el mismo lugar, entre el olivar y los eucaliptos, "están siendo depositados permanentemente" restos de las podas de jardines de chalés y parcelas de la zona. Estos ramajes, según el colectivo, son incinerados "poniendo en peligro la masa forestal de la zona y la vida de las personas" que allí se congregan los fines de semana.
La Sociedad Ecologista Alwadi-ira recordó también que ya ha puesto de relieve, "en repetidas ocasiones, ésta y otras actividades ilegales llevadas a cabo en distintos puntos de la Retama o sus alrededores". Según criticaron, estas agresiones vienen siendo "permanentes desde hace más de diez años".
Por todo ello, los ecologistas reclamaron que se tomen las medidas necesarias para que cese esta actividad y que se realicen las gestiones pertinentes para determinar al responsable de la actividad denunciada, imponiéndole las sanciones que pudieran corresponderle. Finalmente exigieron que todas las acciones que se emprendan les sean comunicadas.
