ECIJA (SEVILLA), 9 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los votos del Equipo de Gobierno de Ecija --PSOE e IULV-CA-- y del PP han dado luz verde en el pleno extraordinario celebrado hoy en el Ayuntamiento astigitano al proyecto de obras de la superficie de El Salón, un documento elaborado conforme al proyecto diseñado por el arquitecto Félix Pozo, con las siete aportaciones fruto del proceso participativo de asociaciones y colectivos ciudadanos que se incorporaron al mismo en la primavera del pasado año.
En un comunicado remitido a Europa Press, el Ayuntamiento de Ecija señaló que la moción elevada a pleno por el Gobierno municipal obtuvo el apoyo de socialistas, populares y concejal de IULV-CA, aunque los ediles andalucistas se abstuvieron. Para el alcalde, Juan Wic, se da así continuidad a las casi concluidas obras de construcción del aparcamiento bajo superficie, con el objetivo de que esta emblemática plaza ecijana pueda ser disfrutada en el menor tiempo posible.
Asimismo, el pleno aprobó por unanimidad suscribir un convenio para la ejecución de estas obras con la Consejería de Obras Públicas, mediante el cual la administración autonómica cubrirá el 80 por ciento del coste de las obras, presupuestadas en 2,7 millones de euros, aportando el Ayuntamiento el 20 por ciento restante. Descripción de la superficie del Salón
El proyecto ahora aprobado de la futura plaza de El Salón recoge la obra de superficie de esta plaza, con una superficie de 4.620 metros cuadrados, más los encuentros de las distintas calles perimetrales que confluyen en la plaza y la de Santa María, lo que suman otros 5.960 metros cuadrados.
DETALLES TECNICOS La idea que preside el proyecto es la de definir un rectángulo de pavimentación regularizada, sobre el irregular entramado histórico que constituye el dédalo de callejones y espacios residuales que aparecen en el entorno de la Plaza de España, con la intención de dotar unidad allí donde ésta no existe. El pavimento será de mármol, para diferenciarse del general adoquinado de granito perfilado con que se diseña el resto de calles circundantes al Salón. A su vez, tres tonos de mármoles, rosado, crema y blanco roto, salpican de forma inesperada cualificando por su presencia todo el nivel del pavimento y todo el conjunto se separa del granito que lo circunda mediante una línea continua de luz empotrada en el suelo, que de noche remata la superficie pavimentada de mármol, trazando una luz que se difumina desde el suelo. Hay que señalar que el elemento más significativo que se oculta bajo el nuevo tapiz de mármol es el aparcamiento subterráneo con 301 plazas que se está terminando, sobre el que está prevista una capa de 80 centímetros de tierra vegetal para poder sembrar distinta vegetación.
En la zona Sur, la menos monumental, buscando proteger más del sol y del ruido del tráfico, se situarán gravilleras robustas y una alameda para el paseo y estancia, recorrida longitudinalmente por tres estanques iluminados y un surtidor de agua; mientras en la zona Noroeste, delante del Casino, se sitúan naranjos amargos y delante de los miradores unos parterres de flores que finalizarán en un bosque de palmeras datileras, que acompañarán en escala a la espadaña de la iglesia de San Francisco.
El aparcamiento subterráneo se comunicará con el exterior mediante dos salidas, dos cajas de vidrio de seguridad serigrafiados con fotografías con motivos antiguos del Salón, englobando las escaleras y ascensores; mientras la otra pieza que emergerá sobre la cota de la plaza es la superficie de vidrio que cubrirá y protegerá los restos arqueológicos de la natatio romana, convenientemente iluminada.
