SEVILLA, 2 Ene. (EUROPA PRESS) -
El concejal del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Sevilla Joaquín Peña alertó hoy sobre el "peligro" que correría en estos momentos el plan económico y financiero puesto en marcha por la empresa municipal de limpieza (Lipasam), tras la denegación por parte de la Junta de Andalucía del permiso para pasar de corto a largo plazo una operación de crédito de 30 millones de euros que el ente tiene firmada con varias entidades bancarias.
En un comunicado, Peña concretó que se trata de una resolución de la Dirección General de Relaciones Financieras con las Corporaciones Locales, dependiente de la Consejería de Economía y Hacienda de la Junta de Andalucía, mediante la cual se desautoriza al Consistorio a pasar de corto a largo plazo 30 millones de parte de la deuda que tiene contraída con los bancos.
Hacienda sólo permite que se realice esta operación sobre 14 millones correspondientes a otra deuda diferente y no la de los 30 millones de inversiones ya ejecutadas. El edil popular expuso que, según se deduce de las alegaciones presentadas por la corporación local, la Junta ha autorizado la operación sobre una partida correspondiente al programa de inversiones incluidos en la memoria de Lipasam para el bienio 2006-2008, "y no para los 30 millones ya ejecutados, que es para lo que Lipasam ha pedido autorización para la reconversión".
"Este cúmulo de despropósitos va a provocar que se ponga en peligro el plan de saneamiento puesto en marcha por Lipasam ante su grave situación financiera, además de un incremento medio de un 110 por ciento en los tipos de interés a pagar sobre esos 30 millones de euros y la necesidad de elaborar un nuevo plan de saneamiento que aborde esta nueva situación tras la denegación de la Junta de Andalucía", dijo Peña, que añadió al respecto que el secretario general municipal ha recogido en las alegaciones que "estamos hablando de operaciones de capital cuyo vencimiento no es soportable en estos momentos por Lipasam".
Para el concejal del PP y consejero de Lipasam, "ésta es una prueba más de cómo se hacen las cosas en el Ayuntamiento de Sevilla y de cómo la pésima gestión de Monteseirín al frente de las empresas municipales las está llevando a la deriva".
Peña señaló como culpable al gobierno municipal tras conocer las alegaciones presentadas por el interventor del Consistorio en las que el alto funcionario asume que parte de la culpa está en el gobierno municipal y en los responsables de Lipasam, "ya que dice literalmente que la fuente utilizada para el pago que en su momento escogió la sociedad mercantil no fue la adecuada", refiriéndose a con qué dinero se han pagado las inversiones ejecutadas, y a la "confusión" que ha provocado la denegación de la Consejería de Economía y Hacienda sobre qué deuda es susceptible de tener la reconversión a medio y largo plazo.
