Los hechos ocurrieron en la manifestación del 8 de marzo de 2018 cuando los acusados hicieron un vídeo que se hizo 'viral'
SEVILLA, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de lo Penal número 1 de Sevilla ha condenado a tres hombres, identificados como B.L.G., A.V.R. e I.J.V.O., a una pena de seis meses de cárcel por mofarse de las participantes en la manifestación por el Día Internacional de la Mujer Trabajadora del 8 de marzo de 2018 en la capital hispalense en un vídeo que se hizo 'viral'.
Según han informado fuentes próximas al caso a Europa Press, la sentencia ha sido dictada 'in voce', tras el acuerdo de conformidad que han llegado las partes en el que se ha acordado para los acusados una pena de seis meses de prisión y una multa de seis meses con cuota diaria de seis euros (1.080 euros) por un delito de odio.
Asimismo, la sentencia, que es firme y contra la que no cabe recurso, refleja que cabe apreciar en la actuación de los encausados la circunstancia atenuante de confesión, ya que habían reconocido la realidad de los hechos desde el primer momento.
Cabe apuntar que la Fiscalía de Sevilla solicitaba inicialmente para los procesados una pena de diez meses de cárcel y 3.000 euros para los tres acusados por un delito de odio del artículo 510 del Código Penal.
A petición de las partes, la Sala ha acordado la suspensión de la pena por un período de dos años en el que los tres encausados se comprometen a no cometer ninguna infracción penal.
Cabe destacar que, según ha indicado Facua en un comunicado,
que la instrucción de la causa se inició a raíz de la denuncia presentada por un directivo de esta asociación de consumidores quien además forma parte del equipo jurídico de la organización a nivel nacional.
El vídeo que refleja los hechos enjuiciados, que se hizo viral tras compartirse en una red social, se aprecia calificativos tales como 'golfas' y expresiones como 'hay que fregar más', tal y como ha señalado Facua.
El caso fue investigado inicialmente por la titular del Juzgado de Instrucción número 11 de Sevilla, Cristina Loma, quien en enero pasado acordó la apertura de juicio oral tanto contra los dos protagonistas del vídeo como el amigo que los grabó, y que no aparece en las imágenes difundidas en las redes sociales.
