SEVILLA, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Sevilla ha dejado visto para sentencia el juicio contra M.L.N., para quien la Fiscalía ha mantenido la pena de 29 años de cárcel por prender fuego a un bloque en Alcalá de Guadaíra (Sevilla) con tres 'okupas' dentro, a los que conocía.
En concreto, la Fiscalía solicita para este hombre once años por un delito de incendio consumado en concurso ideal medial con otro de homicidio en grado de tentativa y 18 por otros dos intentos de homicidio.
Durante esta sesión, en la que el acusado ha mantenido su inocencia en su último turno de palabra, han declarado los tres 'okupas', los cuales han culpado a este hombre pero ninguno de ellos vio cómo prendía fuego al bloque.
En concreto, la persona que vivía de manera habitual en la citada vivienda desde hace un año, y que conocía al acusado "desde chico", ha explicado que aquella noche, el 2 de octubre de 2018, quedó con él en que se personaría en la casa pero que "como iba tan borracho", le dijo que no podía dormir allí. "Entonces se fue muy enfadado, volvió al rato y prendió fuego a la casa tras decirme que ahora me iba a enterar", ha señalado, quien ha recordado que "por poco" no se asfixiaron.
Otro de los 'okupas' ha asegurado que en el momento en el que surgió el fuego "no había más personas" en la calle y ha insistido en que el acusado sabía que estaban dentro de la casa, mientras que su pareja, que también estaba en la vivienda ha señalado que vio cómo M.L.N., "cogió una botella, la tiró contra la casa y de repente empezó a arder", aunque, posteriormente a preguntas de la defensa, ha admitido que ella no vio "cómo quemó" el inmueble ni tampoco cuando se marchó.
Por su parte, los peritos que se encargaron de estudiar las causas del fuego han reconocido que no pudieron precisar cuál fue el punto concreto donde se originó, más allá de los enseres que había en la entrada del bloque, ni cómo se inició. Lo que sí han rechazado es que el fuego se produjera "por una negligencia, sino que fue por conducta humana", a lo que han añadido que "con una colilla se podría haber prendido porque había mucha basura".
Durante la exposición de su informe final, la fiscal, quien cree que el acusado debe tener "una sentencia condenatoria", ha recordado que a éste "se le encontró un mechero y a la entrada del bloque un colchón quemado", así como que las víctimas "no tenían otra forma de salir del dormitorio", por lo que "el resultado podría haber sido otro" si no llega a ser por los bomberos.
Por su parte, la defensa ha pedido la absolución de su cliente al considerar que no está acreditado su culpabilidad, ya que nadie "lo vio prender el fuego", por tanto no se puede dar por probado "el delito de incendio, lo que conlleva a negar los tres de intento de homicidio". No obstante, ha pedido que, en el caso de que sí se aprecie delito, se le condene por daños con la atenuante de actuar bajo los efectos del alcohol.
