Tribunales.- El juzgado admite a trámite una denuncia de Adepa por la destrucción de restos en la Encarnación

Actualizado: miércoles, 7 octubre 2009 19:47

SEVILLA, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Juzgado de Instrucción número 17 de Sevilla ha admitido a trámite una denuncia presentada por la Asociación para la Defensa del Patrimonio (Adepa) en relación a la supuesta destrucción de restos arqueológicos prerromanos, romanos, andalusíes y modernos con motivo de las obras del proyecto Metropol Parasol en la Plaza de la Encarnación de la capital hispalense.

Concretamente, la titular del juzgado, María del Pilar Llorente, da cuenta en una providencia a la que ha tenido acceso Europa Press de la presentación a finales de agosto de esta denuncia y solicita un informe completo a la asociación conservacionista, lo que el colectivo ya ha remitido al ente judicial.

En el informe, Adepa hace constar que los restos arqueológicos descubiertos eran "verdaderamente importantes, aunque en ocasiones parece intuirse cierto interés en no magnificarlos en exceso para evitar que pueda ocasionarse algún tipo de trastorno administrativo a la marcha de la obra".

Así, recuerdan que desde la propia dirección arqueológica de las obras se calificó al lugar como "un auténtico Guggenheim", mientras que "ahora parece que lo que se descubre en la Encarnación carece de interés para ser conservado".

De esta manera, y según la entidad denunciante, se han constatado "reiterados destrozos de restos arqueológicos", entre los que se encontrarían, según los conservacionistas, desde vestigios del convento de la Encarnación del siglo XVIII hasta restos de una ciudad tartessia, pasando por cinco esqueletos humanos, dado que la instalación del basamento de las tres columnas de la cubierta "han ocupado el espacio de restos de muchísimo valor".

Éste ha sido uno de los puntos tratados por la Comisión Ciudadana de Patrimonio relacionados con el proyecto de la Encarnación. El otro, según explicó a Europa Press el portavoz del colectivo, Rafael Sanmartín, está el incumplimiento de varios preceptos de la Ley de Patrimonio, entre los que destaca la altura de 32 metros, "muy superior" a las de las torres de la Iglesia de San Pedro y la de la Anunciación.

"Desde cualquier punto en el que uno se ponga al suroeste de la Encarnación no se puede ver la Giralda", señaló Sanmartín, que aludió a la altura "desorbitada" del proyecto justo al lado de dos edificios "catalogados".