SEVILLA, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -
El sector de vecinos de la barriada de Sevilla Este más cercano a las avenidas del Deporte y Emilio Lemos, uno de los núcleos de prostitución que existen en la capital hispalense, aludió hoy a posibles movilizaciones de seguir sin dar resultado las medidas contra la prostitución que han empezado a llevarse a cabo en la zona.
El secretario de la asociación de vecinos 'Las Ciencias', Víctor Ogalla, explicó a Europa Press que tienen constancia de que los técnicos de la administración han empezado un trabajo de "concienciación para que dejen de hacer este trabajo" con la conversación directa con las mujeres que ejercen esta actividad, si bien, como ha pasado en otros lugares, éstas siguen prostituyéndose.
"No hay más prostitutas, pero tampoco menos, sino que todo está igual", expuso Ogalla, que agregó que "a la hora de llevar a cabo las acciones vecinales no actuamos por iniciativa, sino más bien atendiendo a las quejas y las demandas de los vecinos, que por ahora no dicen más de lo habitual, aunque si la cosa sigue así ya tendremos que hacer algo".
Y es que, según el secretario de la asociación de vecinos 'Las Ciencias', los residentes del entorno han acordado con el Ayuntamiento un 'in-pass' para observar si las medidas iniciales del Consistorio tienen efectividad, algo que por ahora no se ha producido.
El único lapso de tiempo en el que se observó una reducción del fenómeno fue cuando, a finales de 2008, la Policía Local comenzó una labor de presencia disuasoria en los alrededores de la tradicional zona de actividad de estas personas en el barrio --Emilio Lemos y la parte más cercana al mercadillo--. "Luego, cuando se retiraron, la situación volvió a quedar exactamente igual", expuso.
Ello trae consigo los mismos problemas que los vecinos han denunciado históricamente, centrados en el menudeo de drogas, broncas y peleas, pues la prostitución en Sevilla Este es, según los vecinos, una actividad "histórica", dándose el "agravante" de que el colegio 'El Manantial' está en el entorno, "y no es algo muy agradable para los niños los restos de preservativos y jeringuillas que quedan en el lugar".
