MÁLAGA, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Turismo y Comercio, Rafael Rodríguez, ha participado este miércoles en el ciclo de conferencias 'Cultura alimentaria y ciudadanía' del Ateneo de Málaga con su ponencia 'Turismo, agricultura y gastronomía en la construcción de Andalucía'. Así, ha destacado que el turismo gastronómico es "una oportunidad de revitalización de la actividad económica".
De este modo, ha subrayado la labor que realiza la asociación Carta Malacitana, ya que contribuye "a mantener vivo nuestro patrimonio culinario, que es una parte fundamental de nuestra realidad como pueblo andaluz y malagueño".
Asimismo, ha informado de que, según datos oficiales de Saeta, el año pasado Andalucía recibió alrededor de 650.000 turistas atraídos por su enogastronomía, cuyo gasto medio diario superó los 100 euros, situándose por encima de los turistas generales.
De este modo, Rodríguez ha considerado que el turismo gastronómico y el enológico "es un segmento turístico emergente y una fórmula de rentabilización de actividades económicas". Por ello, "Andalucía tiene una potencialidad que tenemos que desarrollar en toda su plenitud", ha añadido.
LOS PAPELES DEL TURISMO ENOGASTRONÓMICO
Ante el contexto de crisis económica actual, "es obligación de los poderes públicos potenciar su desarrollo", y, para conseguir la recuperación de esta situación, es "imprescindible" atender a los cuatro papeles que actualmente desempeña el turismo enogastronómico, según ha manifestado el consejero.
El primero de estos papeles que desempeña es el de recuperador de la biodiversidad, ya que este tipo de turismo "exige un trabajo de recuperación de la producción local".
Por otro lado, ha señalado que el segundo es el recuperador de la identidad territorial, que trae aparejado una fijación de la población al territorio. Ha explicado que en 2015 se prevé que el 75 por ciento de la población se desplace del campo a la ciudad, debido, entre otras causas, a la imposibilidad de trabajar en las zonas rurales.
Así, con la utilización de productos autóctonos se podrá desarrollar un espacio de producción que permita a los ciudadanos rurales vivir en su zona.
El tercero es su aspecto ecológico, que aporta unos parámetros de calidad elevado a los productos. Y, como último, ha indicado el elemento cultural, que permite a las zonas donde se desarrolla este tipo de turismo tomar conciencia de su propia identidad.
FORMACIÓN Y DIFUSIÓN
De este modo, el turismo enogastronómico "puede ser uno de los pilares en que se asiente el nuevo modelo de turismo de Andalucía", ha declarado. Para conseguirlo, "es necesario establecer los dos pilares donde asentarse, como son la formación y la difusión", ha añadido.
El objetivo de la formación es "insertar la cultura y el patrimonio alimentario andaluz en los programas educativos", así como "capacitar a los profesionales en restauración para desarrollar una red de establecimientos de alta calidad", ha expuesto el consejero de Turismo y Comercio.
Para llevar a cabo la difusión de este tipo de turismo, Rodríguez ha destacado que "son imprescindibles campañas que den publicidad a nuestras singularidades culinarias".
PRÓXIMAS LÍNEAS DE TRABAJO
Por otro lado, ha desglosado las diferentes líneas de trabajo que se llevarán a cabo desde la Consejería de Turismo y Comercio. En primer lugar, dentro del Plan de Fomento del Turismo de Interior, el segmento gastronómico "tendrá un peso muy importante y será una de sus piezas vertebradoras".
En segundo lugar, a finales de noviembre en Torremolinos se celebrará la Conferencia Estratégica de Turismo, "con la que se pretende poner en marcha un proceso de diálogo con todo el sector turístico", ha recordado Rodríguez.
Además, el consejero ha señalado que actualmente ya se está trabajando en el segmento gastronómico dentro del actual Plan de Calidad Turística de Andalucía de la Dirección General de Calidad, Innovación y Fomento del Turismo de la Consejería.
Por un lado, a través de una serie de jornadas formativas sobre las potencialidades que ofrece la gastronomía andaluza y que tendrán lugar en el Hotel Escuela Santo Domingo de Archidona. Por otro lado, con la creación de un club de producto de turismo alimentario.
Por último, Rodríguez ha indicado la "importancia" que tiene para su departamento "trabajar conjuntamente con todos los agentes socioeconómicos implicados, para así aprovechar todo el potencial que tiene el turismo enogastronómico en Andalucía y en Málaga".
