El alcalde de Huesca insta a los propietarios del Polígono 14 a alcanzar un acuerdo antes de un año

Actualizado: jueves, 27 mayo 2010 22:10

HUESCA, 27 May. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Huesca y responsable del área de Urbanismo, Fernando Elboj, ha instado a los propietarios del Polígono 14, conocido como Fosal de Moros, a llegar a un acuerdo sobre el proyecto urbanístico que se ha de realizar en esta zona antes de un año.

De no ser así, el Ayuntamiento presentará su planteamiento de reordenación, ya que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 2003 establece un plazo máximo de ocho años para dar solución a esta cuestión a instancia del consistorio.

Propietarios y Ayuntamiento de Huesca llevan desde 2003 sin ponerse de acuerdo para desbloquear el proyecto urbanístico del Polígono 14, que está pendiente desde 1980, un acuerdo al que se debe llegar antes del año 2011, recordó Elboj en rueda de prensa.

En caso de que finalmente no se logre, será el Ayuntamiento oscense el que decidirá el proyecto, aunque esto no implicaría la ejecución del mismo, ya que "con la Ley de Urbanismo de Aragón en la mano, el solar no puede quedar sin definición", apuntó el primer edil.

Se trata, añadió, de "un resquicio que la ley da a los ayuntamientos para evitar que distintos solares, ante la falta de iniciativa de los propietarios, se quede sin desarrollar".

El consistorio oscense ha enviado una carta a cada uno de los propietarias del terreno en la que explica los pormenores legales del proceso y el alcalde les insta a llegar a un acuerdo.

Según se ha puesto de manifiesto en los últimos años, los propietarios apuestan por mantener lo que han denominado "modelo histórico" de la zona, definiendo el suelo como consolidado y proyectando edificios en planta baja y hasta dos alturas, un modelo que, según Elboj, no permitiría modificaciones futuras de la edificabilidad.

Por su parte, el Ayuntamiento y el Gobierno de Aragón establecen que el suelo es no consolidado y que así figura en la modificación aprobada del PGOU. Esta denominación sí permite modificaciones en la edificabilidad, con los consiguientes beneficios, y supone "ventajas urbanísticas", aunque los propietarios deberían asumir las cargas.