ZARAGOZA, 10 Dic. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de CC.OO.-Aragón, Julián Buey, ha criticado este miércoles que "está retrocediendo" el reconocimiento de las enfermedades profesionales. Desde que en 2005 la Seguridad Social identificara 1.800 patologías, el registro ha caído "de forma vertiginosa", hasta las más de 300 de la actualidad, debido al cambio de criterios para consignarlas.
En declaraciones a los medios de comunicación, con motivo de la jornada sobre el tema 'Las enfermedades profesionales, del reconocimiento a la prevención', dedicada a cualificar a los cuadros sindicales sobre esta materia, Julián Buey ha aseverado que "hay un infrarregistro, un infrarreconocimiento de estas enfermedades".
Ha agregado que una persona puede caer enferma por "múltiples factores", señalando los psicosociales, los químicos y otros, para lamentar que a la vez hay "pocas posibilidades de que se le reconozca esa enfermedad profesional".
Asimismo, el secretario general de CC.OO.-Aragón ha comentado que las enfermedades profesionales no solo afectan a las personas, sino que se están derivando sus costes a la Seguridad Social, a lo que ha añadido que al no reconocerse "mal se puede prevenir".
Julián Buey ha confiado en que la nueva Estrategia de Prevención de Riesgos Laborales, que se va a negociar en breve y que se aplicará en toda España, recoja mejor estos aspectos.
Ha apuntado que las enfermedades profesionales "perjudican la productividad", lamentando que los empresarios tienen "una vista muy puesta en lo corto, en la cuenta de resultados, y poca visión de futuro".
"MUCHOS INTERESES"
La especialista en medicina del trabajo María José López ha indicado que "hay muchos intereses y las mutuas se quitan de encima esta problemática", aunque hay muchas patologías laborales fáciles de diagnosticar, entre las que ha citado la silicosis.
López ha resaltado que el cáncer está infradeclarado en un 98 por cien y la sordera en un 90 por ciento, incidiendo en que "estos costes que no se diagnostican los asume el sistema público de salud". "Las mutuas reciben el dinero" de la Seguridad Social para estas contingencias, ha agregado.
Asimismo, María José López ha destacado que en las empresas se hace poca labor de prevención, afirmando que "las enfermedades profesionales son fracasos de la prevención", aunque en el siglo XXI se está en condiciones de prevenir, ya que "hay soluciones técnicas para mejorar las condiciones de trabajo".
La especialista ha llamado la atención sobre la ausencia del estrés y otros problemas de salud mental en la lista oficial de enfermedades profesionales, así como algunos trastornos de la voz, indicando que, en general, "si se declararan todas las enfermedades que están en el listado, el panorama sería muy diferente".
A su juicio, la calidad de la prevención de riesgos laborales "es bastante deficiente" en las empresas españolas", ya que si bien cada año se realizan millones de reconocimientos médicos laborales "no se identifican las enfermedades profesionales" y no se notifican.
Además "no se identifican bien los riesgos o bien se minimizan" y, de hecho, "tenemos muchísimos casos de cancerígenos que no han sido identificados". Ha apuntado que en la Comunidad de Madrid numerosas empresas desconocen los elementos cancerígenos presentes en sus centros laborales.
