ZARAGOZA, 12 May. (EUROPA PRESS) -
Chunta Aragonesista (CHA) ha criticado hoy los "vaivenes" del presidente de Aragón, Marcelino Iglesias, en sus declaraciones respecto al trasvase de agua del río Ebro a Barcelona. Para CHA, Iglesias sufre "inconsistencia política y desconcierto ante qué hacer: si defender los intereses de su país o los de su partido".
"Se las está viendo y deseando para salir del atolladero en el que se metió, contra los intereses de Aragón y sus propios compromisos electorales, cuando se puso del lado de los instigadores de este trasvase del Ebro a Barcelona", afirma la presidenta Nacional de CHA, Nieves Ibeas.
"Las lluvias han hecho aún más evidente lo que ya estaba claro para la gran mayoría de los aragoneses: que no había ninguna razón para apoyar este trasvase y que la supuesta situación de emergencia en Barcelona era una mera excusa para hacer un trasvase permanente", señala Ibeas.
Para la presidenta de CHA, "lo más extraño es que ahora Iglesias manifieste estar dispuesto a ir a los tribunales para exigir el cumplimiento del Real Decreto-Ley (de forma que éste deje de estar en vigor en cuanto deje de haber "extraordinaria necesidad"), y no dijera lo mismo cuando miembros de la Generalitat y del Ministerio de Medio Ambiente señalaron que no habría nada que pudiera parar este trasvase".
"¿Dónde estaba entonces Iglesias?, ¿por qué ahora dice lo que dice y no lo dijo antes? --se pregunta--. Está claro que está intentando ganar tiempo, una vez más, ante la opinión pública aragonesa, que él sabe que es mayoritariamente contraria a este trasvase del Ebro", considera Ibeas.
La mejora de la situación de las cuencas internas de Cataluña, un 5 por ciento ya desde la semana pasada, y con previsión de aumento gracias a las últimas lluvias, "no ha llevado consigo ninguna declaración pública del Gobierno estatal ni del de la Generalitat de que se fuera a estudiar, retrasar o suprimir las obras del trasvase aprobado".
Ibeas afirma que "nadie se ha creído que hubiera unas circunstancias de extraordinaria necesidad que hayan motivado la aprobación del real decreto-ley" y añade que "cada vez queda más claro que todo ha sido un buen montaje del PSOE al que Iglesias se ha prestado sin calcular las consecuencias que ello tendría para su partido en Aragón, y ahora, cuando no ya no le queda ninguna credibilidad, está pretendiendo arreglarlo para salvar el tipo: el suyo, el de su Gobierno y el de su partido".
