CASPE (ZARAGOZA), 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del grupo municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Caspe, Cristian Poblador, ha lamentado los perjuicios que la paralización y el retraso de las obras en la calle Albareda están ocasionando a los vecinos y comerciantes de esta vía de la localidad zaragozana.
"Las obras comenzaron en julio y tenían que estar entregadas el 15 de septiembre, pero ya avisamos de que iban por mal camino, de la falta de pericia profesional de la empresa y de que no se acabarían en plazo", ha aseverado el concejal del partido liberal, al recordar que el equipo de gobierno les pidió entonces "paciencia", pero el contrato ahora "se ha resuelto y veremos cómo acaban estas obras".
El portavoz de la formación naranja ha remarcado que este proyecto "es un desastre en una calle céntrica, donde residen vecinos mayores y hay bares y tiendas que están desquiciados al comprobar cómo se reducen sus ingresos" por tener la calle "con tierra, agujeros y vallas en mal estado".
La obra se encuentra al 20 por ciento de ejecución y se había obtenido una subvención para su desarrollo, ya que el coste del proyecto rondaba los 100.000 euros, pero podría perderse por la paralización de los trabajos, ha advertido.
Por otra parte, el concejal de Cs ha explicado que el bar de las piscinas de Caspe "lleva un año sin licitarse" y aún falta el estudio de viabilidad. "Es muy triste que unas piscinas municipales pasen todo el año, desde noviembre, sin bar", ha estimado Cristian Poblador, recordando que en verano se instaló una máquina dispensadora de bebida. "Pronto se celebrará en este entorno Expo Caspe, que atrae a miles de visitantes" y tampoco se podrá ofrecer este servicio".
