Expo 2008.- El alcalde Belloch destaca, en el acto inaugural, que "ha nacido una nueva y más hermosa Zaragoza"

Actualizado: viernes, 13 junio 2008 23:43

ZARAGOZA, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, ha destacado en su discurso oficial de la inauguración de la Exposición Internacional de Zaragoza 2008 que "ha nacido una nueva y más hermosa Zaragoza". Esta intervención tuvo lugar esta noche en el Palacio de Congresos del recinto Expo.

En su intervención, se ha dirigido a los vecinos de la ciudad a los que les ha indicado "que nuestros hijos, nuestros nietos, nuestros biznietos nos recordarán con afecto y respeto por lo que, entre todos, hemos hecho" y se ha mostrado convencido de que "nos envidiarán haber vivido con plenitud y alegría este mágico 2008".

Belloch les ha manifestado a los ciudadanos de Zaragoza que "tenéis derecho a disfrutar por lo conseguido" y añadió que "hoy todos podemos estar más orgullosos que nunca de nuestra querida Zaragoza", ciudad a la que ha descrito como "heroica, inmortal y noble Zaragoza, desde hoy también capital internacional del agua".

El alcalde ha recordado cómo hace nueve años surgió la idea de que Zaragoza fuera sede de esta Exposición y como "muy pronto se convirtió en un sueño colectivo, en una ambición de toda la ciudad".

Tras reconocer que el camino "no ha sido fácil, ni nada nos ha sido regalado", relató que cada metro de ribera recuperada, cada dovela de los nuevos puentes, cada palmo de los grandes edificios emblemáticos de esta Expo, "ha costado una cantidad ingente de tiempo, trabajo y entusiasmo".

Belloch ha calificado de "espléndida historia de amor" la construcción de esta nueva Zaragoza, que ha resultado, "como todas las historias de amor, intensa, difícil, apasionante y absolutamente hermosa".

A su parecer, en la ejecución de esta Expo se ha aplicado "la fe sincera y la energía sin tasa que tenemos los aragoneses cuando acometemos una empresa en la que creemos" para rememorar que el motivo de fondo de esta Muestra Internacional es un "cariñoso y sincero homenaje a nuestros antepasados que hace doscientos años dieron al mundo un ejemplo insuperable de heroísmo ciudadano y militar ante el poderoso ejército de Napoleón".

Además, "nos obliga la admiración hacia quienes, cien años después, decidieron honrar a los héroes de 'Los Sitios' de la manera más pacífica imaginable: organizando una Exposición Internacional hispano-francesa, que prefiguró en estimable medida la Zaragoza del siglo XX".

El alcalde de Zaragoza ha enfatizado cómo se ha aprovechado el desafío que representaba la Expo para realizar una transformación urbana a gran escala con el "objetivo indisimulado de ser una gran ciudad de éxito en la Europa del siglo XXI".

Tampoco fue casual el tema escogido, ha precisado Belloch, para reconocer que "sabíamos que el agua y el desarrollo sostenible era un tema estratégico clave para el siglo XXI que podría concitar --como así ha sido-- un interés universal, pero en la elección de ese tema había otra clave: el agua ha sido siempre, desde la fundación de la ciudad, parte primordial de nuestra razón de ser".

Un objetivo que Belloch apuesta por mantener en el futuro, al aseverar que "Zaragoza aspira a convertirse en un permanente foro mundial de debate e intercambio de conocimiento sobre la gestión del agua para un desarrollo sostenible".

Tras hacer una radiografía del estereotipo de los aragoneses, que "tenemos fama de ser sobrios, de considerar inapropiado exteriorizar nuestros sentimientos, de raramente pedir favores y, con igual escasez, dar las gracias", Belloch anunció que se permitía contradecir esos "mandamientos no escritos" por tratarse de una "noche mágica en que la Expo empieza a andar".

Una Expo sobre la que precisó que "no quiero ser sobrio al constatar las maravillas", que además se ha realizado en un tiempo récord y que destinada a perdurar en el tiempo.

Sincero, Belloch añadió que "no quiero disimular ni mi alegría, ni mi orgullo por tener la fortuna de ser alcalde de una ciudad que ha sido capaz de hacer lo que parecía imposible".

En su intervención, tampoco faltaron los agradecimientos a "quienes me sugirieron en el año 1999 la conveniencia de organizar una Exposición Internacional el año 2008" y entre los que citó con especial cariño a Pablo Rico, Carlos Miret, Francisco Pellicer y Jerónimo Blasco.