Fago.- Comienza el juicio contra Mainar, presunto asesino del alcalde, tras casi tres años de espera

Actualizado: lunes, 16 noviembre 2009 10:45

La defensa dice que su cliente es inocente, que es un crimen "tribal" y guarda relación con "la España profunda de Puerto Hurraco"

HUESCA, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Sala de lo Penal de la Audiencia Provincial de Huesca inició, a las 10.15 horas de hoy la vista oral del juicio contra el ganadero y agente forestal Santiago Mainar, imputado por el asesinato del alcalde de la localidad pirenaica de Fago, Miguel Grima (PP), quien falleció por disparos de una escopeta de postas en la noche del 12 de enero de 2007 en la carretera que une los municipios de Majones y Fago.

A preguntas del fiscal jefe de Huesca, Félix Zazurca, Mainar se mostró dispuesto a declarar hoy y se ratificó en su última declaración judicial, es decir, que volvió a proclamar --indirectamente-- su inocencia.

Santiago Mainar llegó a la sede de la Audiencia en una pequeña furgoneta del Cuerpo Nacional de Policía (CNP), vestido con un traje de chaqueta beige y, custodiado por tres agentes del Cuerpo y sin dirigirse a los numerosos periodistas concentrados a las puertas de la sede judicial, entró rápidamente en el edificio, ubicado junto a la Plaza Luis López Allué de la ciudad de Huesca.

Antes de entrar Mainar, sobre las 9.30 horas,el abogado madrileño Marcos García-Montes, quien se encarga de su defensa. García Montes accedió a la sede judicial a pie, acompañado por varias personas, entre ellas las hermanas de Mainar.

En declaraciones a los medios de comunicación, el letrado madrileño expresó que su objetivo es "desmontar la pintoresca declaración autoinculpatoria de autoinmolación" que, a su juicio, hizo Mainar en el mes de febrero de 2007, cuando fue arrestado por agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, ante quienes reconoció ser el autor material y único del asesinato de Grima.

Hoy, García-Montes se remitió al famoso psiquiatra forense español José Antonio García Andrade, al afirmar que "los muertos hablan", lo que le llevó a decir que "un crimen delata psicológicamente a la persona" que lo comete, en el sentido de que permite a los investigadores trazar un "retrato robot" que, en el caso del crimen de Fago, permite asegurar que Santiago Mainar "no tiene nada que ver" con los hechos, puesto que Mainar es un hombre "ilustrado", puesto que era ingeniero agrónomo y es un gran lector, mientras que este crimen es "tribal" y guarda relación con "la España profunda de Puerto Hurraco".

García-Montes aportará pruebas psicológicas, psiquiátricas, oftalmológicas y criminalística que exculpan completamente a Mainar, en su opinión.

Marisa Mainar pidió respeto a los medios de comunicación, recordó que su hermano Santiago ha permanecido más de tres años en prisión y dijo de él que está "muy animado", tras lo que indicó que tiene "muchas ganas" de comparecer ante el juez. "Estamos todos estupendamente", proclamó Mainar.

El abogado de la familia de Grima, el zaragozano Enrique Trebolle, señaló que este es el momento de "transformar" los indicios que llevaron al juez de Jaca (Huesca) a ordenar el ingreso en prisión de Mainar y mantener la decisión hasta hoy en pruebas que sirvan para condenar al ganadero y agente forestal. Los familiares de Grima siguen "desolados" por el crimen, pero ahora "tienen total confianza en la Justicia". Trebolle expresó que la confesión inicial y otras pruebas de tipo objetivo sirven para condenar por completo a Mainar.

El abogado que representa al PP, partido al que representaba Grima, el letrado zaragozano José María Viladés, opinó que la confesión tiene un valor probatorio "total y absoluto", entre otros motivos porque ofreció "una serie de detalles que única y exclusivamente el autor podría conocer", por lo que aunque después se desdijera "tiene un peso total y absoluto".

Viladés aludió a la declaración inicial, que duró unas tres horas y fue grabada por la UCO, y en la que Mainar relató "de forma pormenorizada" lo ocurrido antes, durante y después del asesinato. Mainar habló de forma "suelta" y "distendida" y, de hecho, en algunas ocasiones aparece riéndose durante el interrogatorio.