HUESCA, 12 Sep. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, Alfredo Boné, ha colocado hoy la primera piedra de la planta de clasificación de envases de Huesca, que tendrá capacidad para tratar todos los envases ligeros de la provincia. La inversión asciende a 2.830.386 euros y cuenta con financiación de los Fondos de Cohesión de la Unión Europea.
Una vez que entre en funcionamiento, la planta creará 14 puestos de trabajo directos y 18 de manera indirecta. Previamente, en la fase de construcción se crearán 15 directos y 40 indirectos. Además, el tratamiento de residuos en la provincia de Huesca generará otros 161 de manera directa, 128 en la construcción y 33 en la explotación, informan desde el Gobierno de Aragón en una nota de prensa.
La planta de envases se enmarca en el Plan de Gestión Integral de los Residuos de Aragón (GIRA) y permitirá "dar un gran impulso al tratamiento de los residuos de la provincia de Huesca, dotándola de una instalación moderna que dará servicio a todo el territorio, mediante la creación de puestos de trabajo", según ha señalado el consejero de Medio Ambiente.
Boné ha destacado también la importancia del Plan, que nació con un gran consenso para abordar de manera integral el tratamiento de los residuos, consiguiendo que "los residuos hayan dejado de ser un tabú para ser una oportunidad". El consejero ha anunciado en Huesca que las instalaciones contempladas en el GIRA estarán en funcionamiento en 2008.
Al acto han asistido también el secretario general técnico de Medio Ambiente, Roque Vicente, y la directora general de Calidad Ambiental y Cambio Climático, Marina Sevilla, además de representantes de las comarcas y entidades locales del Alto Aragón.
La planta de clasificación de envases se ubicará en el término municipal de Huesca, en la carretera de Fornillos, dentro de los terrenos del vertedero de residuos sólidos urbanos. Junto a la planta de clasificación de envases se ubicará el centro de operaciones de la empresa GRHUSA.
La planta permitirá reducir notablemente los gastos de transporte de estos residuos, que en la actualidad se trasladan a plantas de fuera de Aragón, y contará con una elevada tecnificación, consistente en la clasificación automática de los distintos tipos de materiales a través de separadores ópticos, magnéticos, balísticos y de Foucault.
Al final del proceso se realiza una compactación en balas del material clasificado para su posterior expedición a empresas recicladoras. El material de rechazo generado se enviará al vertedero de RSU anexo a las instalaciones.
La nave de la planta de clasificación tendrá una superficie total de 2.380 metros cuadrados y capacidad para dar servicio a toda la provincia de Huesca, que se estima generará unas 2.200 toneladas al año de envases ligeros.
La planta tendrá una capacidad de tratamiento de dos toneladas a la hora, lo que garantizará la clasificación de todos los envases incluso en periodos punta como puede ser el verano y la temporada de esquí. Una vez construida, la planta será gestionada por el consorcio de la Agrupación número 1-Huesca, constituido por las Comarcas de Alto Gállego, Hoya de Huesca y La Jacetania.
PROCESO DE SEPARACIÓN.
El proceso de separación comenzará con la descarga de los envases en la playa de descarga de los vehículos de la recogida selectiva de envases. Con la ayuda de una pala cargadora, se alimentará la planta a través de una serie de cintas transportadoras. Los envases pasarán en primera lugar por una cabina de preselección donde se eliminarán los voluminosos, grandes plásticos films, entre otros, dotada de cuatro puestos de trabajo.
A continuación los residuos se enviarán a un abridor de bolsas donde se romperán las bolsas de plástico que contienen los envases, para posteriormente dirigirse al separador balístico. En el separador balístico se obtendrán tres fracciones, la fracción fina, la fracción redondos/pesados y la fracción planos/ligeros.
La fracción fina se hará pasar por un separador magnético y se enviará a rechazo para su depósito en vertedero. La fracción plana/ligera se hará pasar por una cabina post-selección con cuatro puestos de trabajo, en la que se eliminará el papel/cartón para su envío a contenedor y posterior reciclaje, se separarán todos los envases aprovechables (BRICKS, MIX, PEHD, PET, PELD) y al igual que la fracción redondos/pesados pasará por un separador magnético para dirigirse a la clasificación automática mediante separadores ópticos y de Foucault.
Previamente, se hará una recirculación al abrebolsas de las bolsas que eventualmente no se hubieran abierto. Por último el resto de la fracción planos/ligeros se enviará a rechazo. El proceso contará con aspiración automática del plástico film.
CLASIFICACIÓN AUTOMÁTICA DE LOS ENVASES.
La clasificación automática de los envases se realizará mediante un separador de Foucault para metales y latas de aluminio y dos separadores ópticos dispuestos en cascada que permitirán la separación en los distintos tipos de envases BRICK, MIX, PEHD, PET, PELD.
Para asegurar la calidad de los materiales, se realizará un triaje negativo posteriormente a la clasificación automática, es decir, de limpieza de los materiales, mediante cintas divididas en dos partes por un deflector habilitando un puesto de control de calidad para los materiales.
Los materiales 'limpios' caerán en dos tolvas y, por consiguiente, en silos distintos optimizando así los recursos humanos. Todos los materiales clasificados caerán en unas zonas compartimentadas donde se almacenarán a la espera de su prensado final.
Adicionalmente, la planta dispondrá de un compartimento para acopio de papel/cartón procedente de recogida selectiva. Según se disponga de cantidades suficientes con la ayuda de una pala cargadora se empujarán los materiales a una cinta transportadora para proceder a su prensado y formación de balas.
La planta contará con dos prensas, una de ellas para los metales y otra que se alimentará mediante una cinta transportadora para los materiales obtenidos de la clasificación. En un área de la nave se acopiarán los distintos tipos de balas en función del material, listas para su posterior expedición a valorizador adecuado.
CASI 200 MILLONES PARA LA GESTIÓN DE LOS RESIDUOS.
La puesta en marcha de las instalaciones previstas en el Plan de Gestión Integral de los Residuos de Aragón (GIRA) supondrá una inversión de 190 millones de euros en la provincia de Huesca. Incluye la construcción y explotación durante 25 años de dos vertederos de residuos industriales no peligrosos (en las zonas de influencia de Huesca y Monzón) y de 18 puntos de gestión de residuos de construcción y demolición. Ambos tipos de residuos están declarados de servicio público de titularidad autonómica.
La inversión será afrontada por los adjudicatarios de los concursos públicos convocados por el Departamento de Medio Ambiente, que recuperarán la inversión mediante las tarifas que cobren a los usuarios de los vertederos. De este modo, se cumplirá el principio de 'quien contamina paga'. Todos los concursos para la explotación de residuos en la provincia de Huesca ya han sido licitados, y se irán adjudicando en los próximos meses.
