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ZARAGOZA, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Justicia de Aragón, Fernando García Vicente, ha sugerido al Departamento de Sanidad, Bienestar Social y Familia del Gobierno aragonés, en coordinación con el Departamento de Educación, Universidad, Cultura y Deporte, que supervise los menús de las empresas que prestan el servicio de comedor escolar y efectúe los preceptivos controles oficiales para garantizar la calidad del mismo.
Así lo ha señalado en un expediente iniciado después de recibir 20 quejas colectivas que hacían alusión a que a lo largo de todo el curso lectivo 2011-2012 y en años anteriores, "los menús de comedores escolares no han sido evaluados desde un punto de vista nutricional por Sanidad, ni antes --sobre el papel--, ni después, tomando muestras para el análisis nutricional".
Estas quejas han sido presentadas por varias asociaciones de padres de alumnos de Aragón. El Justicia recuerda que, según la Ley de Seguridad Alimentaria y Nutrición, las autoridades competentes deben velar "para que las comidas servidas en escuelas infantiles y centros escolares sean variadas, equilibradas y estén adaptadas a las necesidades nutricionales de cada grupo de edad", además de que tendrán que ser supervisadas "por profesionales con formación acreditada en nutrición humana y dietética".
Al respecto, para la Institución del Justiciazgo los criterios nutricionales de la 'Guía de Comedores Escolares de la Comunidad Autónoma de Aragón' pueden ser interpretados por las empresas del sector como no preceptivos, el nivel de exigencia de la estructura del menú escolar es "laxo" y se deja a las empresas "un amplio margen de discrecionalidad en la elaboración de los menús".
En el citado expediente, añade que "compartimos plenamente la necesidad de que existan unos mecanismos de autocontrol, así como que lo más efectivo es el seguimiento continuo en el comedor escolar, competencia que ha de ser ejercida por el Departamento de Educación, Universidad, Cultura y Deporte".
No obstante, para garantizar la calidad del servicio "consideramos que en ese proceso de supervisión y control de los menús escolares no se puede obviar la intervención del Departamento de Sanidad, Bienestar Social y Familia".
CONTROL E INSPECCIÓN
El Justicia también trae a colación un decreto del Gobierno de Aragón que puntualiza que las funciones de control e inspección le corresponden a la dirección general en materia de Salud Pública de la Comunidad autónoma.
Sin embargo, a su entender, "no se da suficiente cumplimiento a este precepto si, tal como nos comunica la Administración sanitaria, la intervención del Departamento de Sanidad se concreta mediante la supervisión por parte de los técnicos de Salud Pública de la existencia y puesta en práctica de los programas de autocontrol que deberán tener todos los comedores escolares".
El Justicia estima que, junto a esos programas de autocontrol y, "al margen de la imprescindible actuación de los nutricionistas de las empresas", se han de implementar otros controles e inspecciones oficiales de los menús escolares a cargo de la dirección general de Salud Pública.
RESPUESTA DEL GOBIERNO
La asociación de madres y padres 'Albada' del colegio Lucien Briet de Zaragoza, que recientemente recordó que desde hace más de tres años reclama a la Diputación General de Aragón que supervise los menús escolares desde el punto de vista nutricional, ha recibido este miércoles un escrito del Departamento de Sanidad.
En él, se informa de que la dirección general de Salud Pública ha establecido una instrucción para el control nutricional de los comedores escolares y precisa que tanto el control sanitario, como nutricional "lo realizarán los técnicos de la zonas veterinarias".
Añade que el equipo técnico del Departamento revisará el cumplimiento del plan de autocontrol a través de las actividades de control oficial y anuncia que ampliará esta información a la asociación de padres.
