Majó cree que España debe competir en calidad e innovación y no solo bajando los costes

Joan Majó, presidente de la Fundación Ernest Lluch y exministro de Industria
EUROPA PRESS
Actualizado: lunes, 24 marzo 2014 20:24

ZARAGOZA, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Fundación Ernest Lluch y ministro de Industria y Energía durante el primer gobierno de Felipe González (1982-1986), Joan Majó, ha opinado que España debe competir en calidad e innovación y no solo bajando los costes porque si exclusivamente hace esto último los competidores serán "países más atrasados, que siempre nos ganarán" en ese concepto.

Así lo ha señalado en declaraciones a los medios de comunicación, antes de inaugurar el III Ciclo 'Primera planta de la economía. España en Europa: apuntes para después de la Gran Recesión', organizado por la Cátedra Ernest Lluch de la Universidad de Zaragoza y la Obra Social de Ibercaja, con la conferencia titulada 'Competitividad y modelo de crecimiento en España', en el Patio de la Infanta de Zaragoza.

Majó ha estimado que "hemos analizado los factores de la competitividad con unos parámetros muy antiguos", para indicar que para ser competitivo hay que "vender un producto o servicio más barato, mejor o uno nuevo", es decir, competir en precio, calidad o innovación.

En el caso de los países que no tiene economías desarrolladas, "solo pueden competir en costes", pero en España "no podemos ser competitivos" solo por eso, "y menos sin tener en cuenta la productividad". En relación con esta última, ha apuntado que "si una persona es el doble de productiva que otra", aunque su salario sea superior, su coste es inferior, ya que "el coste final es la multiplicación del salario y la productividad".

En este punto, ha comentado que "bajar los salarios a veces es necesario, pero añadir productividad es más importante" y "lo mismo ocurre con la calidad y la innovación", como lo demuestra que las empresas más importantes, "no venden más barato, sino que venden cosas mejores".

Majó ha sostenido, por eso, que algunas reformas del Gobierno central, "están desorientadas" ya que "estamos intentando superar una crisis como si fuera un bache", que, una vez has caído en él, "te levantas y sigues andando", y por eso se dice que si comienza a crecer el Producto Interior Bruto (PIB) "hemos salido de la crisis".

OTRO CAMINO

El presidente de la Fundación Ernest Lluch ha manifestado que "esta crisis no es un bache, sino que íbamos por un camino y nos hemos encontrado con que, si seguíamos, había un precipicio" por lo que hay que "pararse y buscar" otro "a la derecha y a la izquierda".

En su opinión, "volver a crecer que es necesario", pero también "hay que cambiar muchas cosas para ir por al camino adecuado y no estamos haciendo suficientemente". Así, ha rechazado, por ejemplo, los recortes en investigación, universidad, ciencia y tecnología, ámbitos que sirven para mejorar la competitividad no por los costes, sino por la calidad y la innovación.

Majó ha defendido que la reducción de costes salariales se realice "de tal manera que se bajen, sobre todo, a aquellas personas o niveles en los que no les influirá demasiado en su consumo" porque si se disminuye un diez por ciento el sueldo de una persona que percibe 15.000 euros al año, "son 1.500 euros menos en el consumo", pero si se aminora en la misma proporción a una que gana 60.000 euros, "seguirá consumiendo lo mismo".

En relación con los impuestos, ha considerado que habría que subirlos, no a las rentas del trabajo, sino "a las de la especulación", que actualmente "pagan menos que las del trabajo", un incremento que "tampoco afectaría mucho al consumo".

Majó también ha criticado cargar en el precio de la energía "costes que deberían estar cubiertos por los presupuestos del Estado", para remarcar que este es un problema que requiere de solución.