HUESCA, 29 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Servicio de Protección de la Naturaleza, Seprona, ha contabilizado 3.300 denuncias por infracciones administrativas en la provincia de Huesca a lo largo de 2007. La mayoría de estas denuncias, 1.295, están relacionadas con la sanidad animal. El resto se refieren a incendios forestales (81); turismo y deporte de aventura (683); protección de espacios naturales (143); caza (132); pesca (141) y residuos urbanos, tóxicos y peligrosos (161).
Además, a lo largo de pasado año, dos personas fueron detenidas por un delito contra la fauna relacionada con el furtivismo y otras siete personas resultaron imputadas como presuntos autores de delitos de incendios forestales, en base a un total de trece diligencias judiciales. Dos de ellas por delitos cometidos contra recursos naturales en el medio ambiente; siete, por incendios forestales y cuatro, por delitos contra la fauna.
De las 3.300 denuncias, 1.295 estuvieron relacionadas con la seguridad animal y son el resultado de la operación Podenco, que la Comandancia de la Guardia Civil de Huesca puso en marcha entre el 1 de marzo y el 15 de abril, encaminada a la detección y control de núcleos zoológicos ilegales, principalmente, de perros de caza y presa.
El responsable del Seprona de Huesca, Arturo Notivoli, explicó que "la operación consistió en inspeccionar estas realas sobre todo de cazadores y se consiguió poner en orden las infraestructuras tal y como lo prevé la Ley. Además se incidió mucho en el tema higiénico y sanitario". En total se inspeccionaron cien realas.
También durante 2007 se llevaron a cabo otras operaciones en la provincia, como la Avutarda, que se llevó a cabo del 10 de marzo al 31 de mayo, para vigilar y controlar la fabricación, producción, comercialización y uso de productos fitosanitarios. Se inspeccionaron 74 establecimientos y hubo un total de 165 denuncias por infracciones administrativas.
Asimismo, se desarrolló la operación Tortuga, con 708 denuncias por asuntos relacionados con acampadas ilegales; la operación antifurtivismo, con la detención de dos personas por la muerte de dos ciervos en la zona de Bailo, y la operación Picaraza, para controlar y detectar actividades irregulares en centros de gestión y tratamiento de vehículos al final de su vida útil.
