ZARAGOZA, 14 May. (EUROPA PRESS) -
El Índice de Precios de Consumo (IPC) subió en Aragón un 0,2 por ciento durante el pasado mes de abril con respecto al mes anterior, y la tasa interanual fue de un 1,9 por ciento. La inflación acumulada se situó en la Comunidad aragonesa en el 1,3 por ciento.
En el conjunto del país, el IPC subió un 1,1 por ciento en el mes de abril en relación al mes anterior, lo que permitió que la tasa interanual se situara en el 1,5 por ciento, una décima superior a la de marzo.
Por grupos, los preciso descendieron en Comunicaciones (-0,9 por ciento), en Ocio y cultura (0,4 por ciento) y en Menaje (-0,1 por ciento) respecto a l mes de marzo. Se mantuvieron invariables en Alimentos y bebidas no alcohólicas, en Bebidas alcohólicas y tabaco y en Enseñanza.
Por otra parte, subieron en Vestido y Calzado (9,3 por ciento), en Transporte (1,4 por ciento), en Vivienda (0,7 por ciento) y en Hoteles, cafés y restaurantes (0,6 por ciento).
Por provincias, en abril, la más inflacionista de las aragonesas fue Teruel, con un 1,2 por ciento y un 1,8 en un año. En Zaragoza, los precios subieron un 1 por ciento y la tasa interanual se situó en el 1,4 por ciento, mientras que en Huesca, la inflación fue la misma, de un 1 por ciento, y los precios subieron en un año un 1,8 por ciento.
SEIS MESES EN POSITIVO
En España, el IPC interanual registró en abril su tasa más elevada desde noviembre de 2008, mes en el que la inflación alcanzó el 2,4 por ciento. El organismo estadístico atribuyó principalmente la variación interanual de la inflación a la subida de los precios de la vivienda por el encarecimiento del gas, así como al incremento que han experimentado los precios de la alimentación, especialmente la carne de ave y las patatas y sus preparados.
Con abril, ya son seis los meses consecutivos en los que el IPC se encuentra en tasas positivas después de una racha de ocho meses en negativo.
El Gobierno estima que la inflación se mantendrá en niveles moderados durante los próximos meses debido al contexto económico. Así, entiende que, aunque el consumo no está creciendo a tasas muy positivas, los precios se están comportando de manera estable.
Según los datos publicados por el INE, la inflación subyacente (que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados) se situó en abril en el -0,1 por ciento, tasa tres décimas inferior a la de marzo. Es la primera vez que el IPC subyacente entra en terreno negativo desde agosto de 1986, fecha en la que comenzó a calcularse este indicador.
