Los pueblos amenazados por la despoblación en las últimas décadas se reconvierten en segundas residencias, según la UZ

Actualizado: lunes, 27 julio 2009 17:50

ZARAGOZA, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -

Los pueblos españoles, especialmente los del noreste de España, amenazados por la despoblación en las últimas décadas, se están reconvirtiendo en segundas residencias durante los fines de semana, gracias a los nuevos modos de vida en este inicio del siglo XXI.

Una investigación del Departamento de Geografía y Ordenación del Territorio de la Universidad de Zaragoza (UZ) incide en los efectos positivos que representa la fragmentación de la vida del español de hoy en día, que le lleva a residir, trabajar, estudiar y pasar el fin de semana en espacios alejados entre sí. Esta situación de rescate de los pueblos abocados a su desaparición en las últimas décadas se repite en el ámbito rural aragonés, y en todo el noreste de España.

'La población española en el debut del siglo XXI' es el título global del estudio monográfico, desarrollado por el Grupo de Estudios en Ordenación del Territorio (GEOT), del Departamento de Geografía de la Universidad de Zaragoza, y que acaba de ser publicado en la revista científica Revue Geographique des Pyrenées et du Sudouest, de varias universidades francesas y del Centre National de la Recherche.

El estudio pone de manifiesto que la mejora de las comunicaciones y la fragmentación de los espacios de vida hace que el ciudadano participe de diferentes territorios, cada vez más amplios, más accesibles y con ajustados costes en transporte y tiempo.

Paralelamente, la presencia parcial de los aragoneses en los pequeños pueblos ha obligado a incrementar la inversión en infraestructuras básicas, de la misma manera que la mejora de los servicios de estos pequeños núcleos ha sido clave en una mayor atracción del residente urbano, que se escapa cada vez más de la ciudad durante el fin de semana.

El investigador del grupo GEOT y coordinador de la publicación de la investigación monográfica en la revista científica francesa, Ángel Pueyo, considera que la presencia parcial de habitantes urbanos en este tipo de núcleos durante el fin de semana o festivos ha evitado su desaparición y de alguna manera, están complementando la territorialidad.

Para el profesor Pueyo, que acaba de ser nombrado director del Departamento de Geografía y Ordenación del Territorio de la Universidad de Zaragoza, estos núcleos pequeños diseminados en el cuadrante noreste español suponen un alto coste en cuanto a transporte, infraestructuras y servicios, sin embargo, su reconversión en espacios residenciales está evitando que esos pueblos hayan desaparecido.

Por otra parte, para la elaboración de este monográfico ha sido fundamental el respaldo de la Subdirección de Censos y Padrón del Instituto Nacional de Estadística, que ha aportado la fiabilidad y la calidad de sus propios datos, y el Área de Cartografía Temática y Atlas Nacional del Instituto Geográfico Nacional.