TERUEL, 27 Ago. (EUROPA PRESS) -
La tormenta de agua y granizo que ayer descargó en las localidades de Báguena, Burbáguena, San Martín del Río y Luco de Jiloca dejó la peor parte en esta localidad. El alcalde de este barrio pedáneo de Calamocha, Serafín Navarro, explicó hoy a Europa Press que "la tormenta dejó 40 litros por metro cuadrado en diez minutos", lo que produjo que "todos los campos quedaran anegados de agua y ha afectado sobre todo, a la cosecha de maíz que ahora está en plena producción".
Según el edil de la pedanía, "la merma que trae consigo esta tormenta" no se podrá conocer con exactitud hasta que llegue la cosecha, el próximo mes de diciembre.
Además, el alcalde de Luco de Jiloca aseguró que "la tormenta ha dejado bastante deteriorados los cultivos de los pequeños huertos de los vecinos de la localidad".
Navarro relató que la tormenta también afecto a los caminos, ramblas y rieras de los campos de Luco de Jiloca. En este caso "tenemos que ver cuáles son los daños reales" aunque ha deseado que "más que un importante daño económico, serán daños materiales que podremos solucionar con maquinaria, como palas".
Aún así, Serafín Navarro aseguró que "a pesar de que cayeron muchos litros en poco tiempo, como el pedrisco iba acompañado de mucha agua, se han mermado los daños que se podrían haber ocasionado a las cosechas".
La tormenta también obligó a cortar un carril del la N-234 como consecuencia de la acumulación de agua y por los desprendimientos de tierra y piedras. En concreto hubo que cortar el carril dirección Zaragoza, entre los kilómetros 200 y 210. La Guardia Civil reguló el tráfico en la zona, mientras se realizaban las tareas de limpieza que, terminaron hacia las 19.40 horas.
