UGT y CC.OO. Aragón rechazan la reforma laboral porque "hace el trabajo sucio a los empresarios"

Actualizado: lunes, 28 junio 2010 16:46

El miércoles habrá concentraciones en Huesca, Zaragoza y Teruel como preámbulo a la huelga general

ZARAGOZA, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los secretarios generales de UGT y Comisiones Obreras en Aragón, Julián Lóriz y Julián Buey, respectivamente, rechazaron hoy la reforma laboral aprobada por el Ejecutivo central porque "hace el trabajo sucio a los empresarios", por lo que reiteraron su llamamiento al seguimiento de la huelga general del 29 de septiembre.

En una rueda de prensa en Zaragoza, Julián Buey indicó que "después de muchos meses de negociación, los empresarios empezaron a perder su interés por negociar y llegar a un acuerdo, porque el Gobierno tenía en la cartera una reforma que supone hacerle el trabajo sucio a los empresarios". "¿Para qué van a negociar si saben que el Gobierno tiene una reforma de una entidad que bajo ningún concepto iban a conseguir en la negociación?", se preguntó.

Buey señaló que "las reformas laborales no sirven para generar empleo" pero que los sindicatos accedieron a negociar "porque en este país tenemos una lacra tremenda, que es la dualidad en el mercado laboral con casi la mitad de trabajadores con contrato temporal o en desempleo, y era un reto importante conseguir una reforma que pudiera ayudar a mejorar esta situación".

El secretario general de CC.OO. Aragón opinó que con la reforma "se generaliza un contrato que abarata el despido improcedente por causas disciplinarias" además de que "hay otras medidas que se dirigen a los trabajadores con contrato estable, ampliando las causas de despido o dejándolas con suficiente ambigüedad como para que un juez pueda determinar como despido procedente por causas económicas".

"Aquí está el meollo de la cuestión porque sitúa a los empresarios ante la posibilidad de despedir por causas objetivas que no tendrán que demostrar y con una indemnización de 20 días, un ataque brutal a la estabilidad en el empleo", dijo.

NEGOCIACIÓN COLECTIVA

Julián Buey agregó que la reforma "también cuestiona la negociación colectiva, que es el eje central, el elemento de confianza en las relaciones entre empresarios y trabajadores, la columna vertebral de los trabajadores, y se la cargan en cierta medida. Los trabajadores tienen que saber que cuestiones que creen tener seguras va a haber más facilidades para cargárselas".

"La reforma no sirve para estimular la economía, no sirve para generar empleo, no recorta la temporalidad y no se limita el contrato de obra y servicio, que es una auténtica estafa y lacra en España y que se legaliza. Las agresiones son tan sumamente graves e inútiles que requieren de una respuesta del conjunto de la ciudadanía muy importante, es una lesión grave", expuso.

Por ello, Buey hizo un llamamiento a la participación en la manifestación que se celebrará en Huesca, Zaragoza y Teruel el próximo miércoles, 30 de junio, a las 20.00 horas, como preámbulo a la huelga general del 29 de septiembre "que va a ser un auténtico éxito porque todas las huelgas generales traen beneficios, vamos a conseguir echar para atrás buena parte de estas medidas", concluyó.

Por su parte, el secretario general de UGT Aragón, Julián Lóriz, afirmó que "ha habido un cambio de orientación en las políticas económicas del Gobierno de España, un cambio de la vía por la que se iba en los últimos años con una posición que no es única de este país, sino que los Gobiernos europeos han decidido rendirse a las exigencias de los mercados".

"Hay unas agresiones a los trabajadores que empezaron a anunciarse en febrero con medidas lesivas, ajustes fuertes y finalmente la reforma laboral lesiva a la que los sindicatos no respondemos de manera precipitada o gratuita, sino dura y contundente", sostuvo Lóriz.

CAMBIO DE "CARRIL"

El secretario general de UGT Aragón reiteró que la reforma "va a reducir la capacidad de inversión, por lo que la recuperación económica será más lenta". "El Gobierno de España se ha cambiado de carril, en lugar de reforzar los servicios públicos de empleo se abre la puerta al negocio privado, se va a favorecer el despido y no se resolverá el fraude de la contratación", criticó.

Además añadió que "es la quinta huelga general en más de treinta años y todas han tenido éxito", si bien reconoció que "la huelga general es el fracaso del diálogo y del acuerdo pero, si nos imponen agresiones a los trabajadores, estamos en la obligación de convocarla".

En respuesta a las personas que consideran que no es un buen momento para convocar una huelga general, Lóriz apreció que "hay una agresión a los trabajadores y la situación de la economía no va a empeorar porque haya un día de huelga, la perjudica mucho más el temor que el Gobierno ha instalado en la ciudadanía".

Por estos motivos, el miércoles, 30 de junio, tendrá lugar una manifestación en Huesca, desde la Plaza de Navarra a la Plaza de Cervantes; en Zaragoza, desde la Plaza de San Miguel a la Plaza de Aragón; y Teruel, en la Plaza de la Catedral, a las 20.00 horas.

Los representantes de ambos sindicatos informaron de que, para preparar la huelga general, tendrán lugar también asambleas en los centros de trabajo a lo largo de los meses de julio, agosto y septiembre, una manifestación en Madrid y actos con la presencia de los secretarios generales de ambos sindicatos en Zaragoza.

Lóriz declaró que la elección del 29 de septiembre como fecha para la celebración de la huelga, tiene que ver con la convocatoria, para ese mismo día, de una euromanifestación en Bruselas, así como para "enmarcarla en un horizonte de agresiones refrendadas por la Unión Europea".

"Seguramente con el plan de ajuste había motivos para la huelga general pero esperamos porque sabíamos que venían más medidas, pero hay un horizonte de más riesgos de medidas lesivas, de hecho, ya están diciendo que la reforma es insuficiente", advirtió.

Lóriz finalizó diciendo que con la huelga general se ha pretendido "dar una respuesta inteligente, acumular fuerzas y hacer el menor gasto posible, dejar pasar el verano para que haya un seguimiento masivo de una huelga general por unos motivos que entienda la ciudadanía y obligar al Gobierno a cambiar de posición".