ZARAGOZA, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Municipal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Zaragoza vuelve a pedir públicamente el cese del teniente de alcalde de Urbanismo, Antonio Gaspar, tras saber "la ocultación desde hace bastantes meses del derrumbe de una cubierta del palacio de Fuenclara, obligando a cerrar dos comercios".
Asimismo, según el PP, "se ha alterado el calendario de terminación de la obra, y se ha mantenido en su desconocimiento incluso a la parte del Gobierno destinataria del proyecto de rehabilitación, eso contribuye a disminuir todavía más la credibilidad política del Área de Urbanismo municipal, y sumerge a todo el gobierno en una profunda crisis de credibilidad pública".
"Un gobierno democrático tiene que cumplir en todo momento con tres exigencias imprescindibles: decir lo que va a hacer, hacer lo que dice y responder de lo que hace. Y ninguna de ellas se está cumpliendo en el Área de Urbanismo", insiste el Partido Popular.
Además, "al oscurantismo" de los planes de acción, sobre cuyo contenido el teniente de alcalde de Urbanismo, Antonio Gaspar, "llegó a decir a la oposición que debería enterarse por los medios de comunicación, se suman la mentira y el desprecio democrático a cualquier sugerencia como ingredientes fundamentales del estilo de actuación".
La eficacia de la gestión, según el PP, "brilla por su ausencia, como lo están demostrando los repetidos fracasos de los asuntos que lleva entre manos, proyectando una sombra nítida de incompetencia política". Y, junto a todo ello, "se carece de respuesta política".
Antonio Gaspar, por lo general, "no responde, y cuando lo hace culpa a la oposición de sus fracasos". Y el alcalde de la ciudad, Juan Alberto Belloch, "se escuda siempre en la temeraria e inaceptable respuesta de que, pase lo que pase, él no va a ir nunca contra su socio de gobierno, dando a entender con ello claramente que le importa más el cargo que la ciudad", concluye el Partido Popular.
Ante esta situación, el PP pide "no ya la dimisión, sino el cese del teniente de alcalde de Urbanismo", lo que "constituye no sólo un acto imprescindible para la rectificación del rumbo urbanístico de la ciudad, sino un auténtico ejercicio de recuperación democrática que interesa a toda la política municipal".
